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Lo Spirito dell’Amore parla dalla Parola di Dio

Riconoscete lo Spirito dell’Amore che vi parla dalla Mia Parola. Ricordate che voi stessi siete di spirito debole, che portate bensì Me come piccolissima scintilla in voi, ma che questa scintilla spirituale in voi sonnecchia ancora, finché non la risvegliate attraverso l’agire nell’amore. Perciò lo Spirito del Padre rivolge a voi delle Parole d’Amore, per indurvi all’amore, affinché attiviate la scintilla spirituale in voi, affinché le diate la vita attraverso l’amore. Se una volta siete nella conoscenza, vi è anche spiegabile del perché vi ammonisco sempre solo all’amore, ma voi che siete ancora ciechi nello spirito, dovete dapprima rivolgere su ciò la vostra attenzione, che ogni Parola che sentite di Me tramite i Miei servitori sulla Terra, è data nell’Amore e deve stimolare all’amore. Se potete negare ad una Mia Parola l’Amore, sareste da scusare di non averla accettata, ma ogni Parola vi deve dimostrare l’Amore del Donatore, ogni Parola deve essere testimonianza di Me come l’eterno Amore, il quale vuole soltanto riconquistare ciò che Gli è andato perduto tramite il disamore. Che vi voglia riconquistare, è fondato solamente nel fatto, che il Mio Amore vuole rendervi beati in eterno. Vi tengo sempre di nuovo davanti agli occhi la vostra infelicità, il vostro stato imperfetto, che non vi può rendere felici e cerco di sospenderlo. E dato che questo lo può fare solamente l’Amore, allora vi predico ininterrottamente l’Amore e vi indico in ogni Mia Parola, che potete formarvi in creature beate solamente tramite l’amore, che vicine al Padre, all’eterno Amore, sono inesprimibilmente felici. Appena avete conquistato la convinzione che tutte le Mie Parole sono date nell’Amore, che indicano solamente l’Amore, dovete riconoscere anche l’Origine, dovete considerare la Mia Parola come Deflusso di Me Stesso, come l’Agire d’Amore sull’umanità empia per portarle l’Aiuto. Se dunque riconoscete lo Spirito nella Mia Parola, riconoscerete presto anche Me, non vi sarà più inafferrabile che Io Stesso Mi manifesto, perché l’Amore genera la Sapienza. Se lasciate agire in voi le Parole d’Amore, allora presto le seguirete, allora anche il vostro pensare sarà giusto, diventerete sapienti, riconoscerete la grande Verità che si cela nella Mia Parola, e quindi anche Me Stesso ed imparerete ad amarMi. Ma voi stessi dovete eseguire il serio esame nella libera volontà, dovete proporre a voi stessi la domanda, quando vi viene offerta la Mia Parola, se ne parla lo Spirito dell’Amore. Non potete essere costretti a questa domanda, deve sorgere dalla vostra propria volontà, perché dimostra la volontà per la Verità, per la giusta conoscenza. Vi verrà data la Risposta, lo Spirito dell’Amore Stesso parlerà in voi e cercherà di agire sul vostro cuore e se siete volonterosi, non sarà senza successo. Dove siete in grado di riconoscere l’Amore, là vi è la Verità, perché l’Amore è divino e può procedere solamente dall’eterno Amore. Ricordate questo, voi che dubitate della Verità della Mia Parola. Potete accettare tranquillamente ciò che lo Spirito dell’Amore porta in Sé, e non avrete mai da temere di venir guidati nell’errore da questo Spirito, perché l’Origine dell’Amore è Dio, e la meta dell’amore è Dio. Giungerete sempre a Me se vi lasciate attirare dal Mio Amore, che vi viene sempre di nuovo incontro nella Parola, che è riconoscibile in ogni Mia Parola per colui che vuole riconoscere.

Amen

Espíritu de amor habla desde la Palabra de Dios....

Reconoced el Espíritu de amor que os habla desde Mi Palabra.... Considerad que vosotros mismos sois de espíritu débil, que probablemente me lleváis como la chispa más pequeña dentro de vosotros, pero que esta chispa espiritual aún duerme en vosotros mientras no la despertáis a través de obras de amor. Y por eso el Espíritu Padre os habla Palabras de amor para animaros a amar, para que activéis la chispa del espíritu en vosotros, para que le deis vida a través del amor.

Una vez que estéis en la cognición, también os resultará comprensible por qué Yo siempre os amonesto a amar, pero vosotros, que todavía estáis ciegos de espíritu, debéis primer prestar atención al hecho de que cada palabra que escucháis a través de Mis siervos en la Tierra, os está dada de Mí de amor y debe estimular al amor. Si pudierais negar el amor a una de Mis Palabras, seriáis excusados por no haberla aceptado. Pero cada Palabra debe probaros el amor del Dador, cada Palabra debe dar testimonio de Mí como Amor Eterno, Que sólo quiere recuperar lo que ha perdido por falta de amor. Y la única razón por la que quiero reconquistaros es porque Mi amor quiere haceros felices para siempre. Una y otra vez pongo ante vuestros ojos vuestra miseria, vuestro estado deficiente, que no puede haceros felices, y éste busco remediarlo. Y como sólo el amor es capaz de lograrlo, os predico constantemente el amor y os señalo en cada Palabra Mía que sólo a través del amor podéis formaros a criaturas bienaventuradas, que son inexpresablemente felices en la proximidad del Padre, el Amor Eterno.

Una vez que hayáis adquirido la convicción de que todas Mis Palabras son dadas en amor, que sólo apuntan al amor, tenéis que reconocer también el origen, debéis ver Mi Palabra como un derramamiento de Mi Mismo, como una obra de amor sobre la humanidad pecadora para traerla ayuda. Y si reconocéis el espíritu en Mi Palabra, pronto también Me reconoceréis a Mí Mismo; Ya no os resultará incomprensible que Yo Mismo Me exprese, porque del amor da la luz a la sabiduría.

Si dejáis que las Palabras de amor obren en vosotros, pronto la seguiréis, y entonces vuestro pensamiento también será correcto, llegaréis a ser sabiendo, reconoceréis la gran verdad que contiene Mi Palabra, y por tanto también reconocerme a Mí y aprender a amarme cada vez más profundamente. Pero debéis llevar a cabo la prueba seria vosotros mismos en el libre albedrío.... debéis plantearos la pregunta, cuando Mi Palabra os sea presentada, de si el espíritu de amor habla desde ella.... No se os puede obligar a responder, debe surgir de vuestra propia voluntad. Porque prueba la voluntad por la verdad, al reconocimiento correcto.

Y habrá una respuesta para vosotros; el Espíritu de amor hablará en vosotros y tratará de influir en vuestros corazones, y si estáis dispuestos, no sin éxito. Dondequiera que seáis capaces de reconocer el amor, allí está la verdad, porque el amor es divino y sólo puede surgir del Amor Eterno. Considerad esto, vosotros que dudáis de la verdad de Mi Palabra. Podéis aceptar sin dudar lo que el Espíritu del amor lleva dentro de sí y nunca tendréis que temer ser descarriado por este Espíritu, porque la fuente del amor es Dios y el objetivo del amor es Dios.... Y siempre vendréis a Mí si os dejáis atraer por Mi amor, que siempre os encuentra en la Palabra, que es reconocible en cada Palabra Mía, para quien quiera reconocer....

amén