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La Presenza di Dio - Il Discorso

Vi vengo vicino con la Mia Parola, vi Sono quindi così presente, quando vi risuona la Mia Parola. E dovete utilizzare questo, perché la Mia Presenza significa per voi la più grande Grazia che potete ricevere da Me, perché non avete ancora raggiunto l’alto grado di maturità, la cui conseguenza è sempre la Mia Presenza e che fa di voi l’essere più felice. Sono comunque con voi, altrimenti non potrei parlare con voi. Ma Io sò della vostra volontà di ascoltarMi, ed è per questo che vi parlo. Io vi Sono presente. Ma sapete in genere che cosa significa che Mi potete percepire, che Io ho una dimostrazione della Mia Presenza nella Mia Parola che vi affluisce dall’Alto? Non vi rendete conto dell’immensa dimostrazione di Grazia, ma Mi ascoltate, come ascoltate un prossimo, quando vi parla. Malgrado ciò Sono Io Stesso, vostro Dio e Padre dall’Eternità, il Quale vi parla in tutta confidenza, come un padre parla con il figlio suo. Non lascio soli i Miei figli, Mi annuncio a loro, parlo a loro, affinché si rendano conto della Mia Presenza, di accettare quindi anche la Mia Parola come Discorso del Padre, al Quale devono soltanto tendere l’orecchio, per sentirLo. E questo è il Mio ultragrande Amore per voi, Mie creature, che Mi induce a seguirvi, benché vi teniate distanti da Me. Ma Io vi voglio indurre al ritorno a Me. Dovete fermarvi sulla via che conduce via da Me, dovete ricredervi ed iniziare lentamente la via del ritorno, dovete riflettere su ciò che il Padre vi dice e seguire ciò che Egli vi consiglia ed esige da voi. Perciò parlo ai figli Miei e siete da lodare beati, quando Mi ascoltate e vi prendete a cuore le Mie Parole, siete da lodare beati, quando riconoscete la Voce del Padre vostro nelle Parole che sentite e quando vi reagite come figli. Allora la Mia Presenza presso di voi diventa costante, vorrete sentirMi in ogni momento ed attraverso questa vostra volontà costringerMi ad Essere con voi e di prendere dimora in voi, perché il vostro desiderio per Me verrà anche certamente esaudito, perché vi amo e desidero il vostro amore. Ed è il più grande esaudimento del Mio Amore, quando voi stessi Mi venite incontro, quando il vostro cuore è attratto da Me, quando il Mio Amore è corrisposto e desiderate parlare costantemente con Me. Allora la separazione fra noi è davvero sospesa, allora il figlio ha ritrovato il ritorno al Padre, ha percorso la via del ritorno nella Casa del Padre, è giunto al Mio Cuore ed ora rimarrà anche eternamente con Me. E posso ottenere questo tramite la Mia Parola, dalla quale percepite il Mio Amore per voi che trova eco nei vostri cuori e perciò la seguite e sentite anche l’effetto di Forza. Allora vi sarà e rimarrà anche consapevole la Mia Presenza, allora voi stessi stabilirete l’intimo legame con Me che fa parte del giusto rapporto di un figlio verso il padre. Mi amerete di tutto cuore e vi avvicinerete sempre di più al Cuore del Padre, finché il figlio non è ritornato al Padre, dal Quale è una volta proceduto.

Amen

Presencia de Dios.... Discurso....

Me acerco a vosotros a través de Mi Palabra, por eso estoy presente ante vosotros cuando os suena Mi Palabra. Y debéis aprovechar esto, porque Mi presencia significa para vosotros la gracia más grande que podéis recibir de Mí, porque aún no habéis alcanzado el alto grado de madurez, cuya resultado es siempre Mi presencia.... y que os convierte en el ser más feliz.... Y, sin embargo, estoy con vosotros, de lo contrario no podría dirigirme a vosotros. Pero sé de vuestra voluntad de escucharme, y por eso también os hablo.... Estoy presente ante vosotros....

¿Sabéis siquiera lo que significa que podéis sentirme, que tenéis una prueba de Mi presencia en Mi Palabra que fluye hacia vosotros desde lo alto? No sois conscientes de la tremenda prueba de la gracia, sino que Me escucháis tal como oís a un semejante cuando os habla.... Y sin embargo soy Yo Mismo, vuestro Dios y Padre desde la eternidad, Quien os habla con toda confidencialidad, así como un padre habla a sus hijos. No dejo solos a Mis hijos, Me doy a conocer a ellos, Me dirijo a ellos para que sean conscientes de Mi presencia y por tanto acepten también Mi Palabra como un discurso del Padre, a Quien sólo necesitan escuchar para oírle a Él.

Y ese es Mi gran amor por vosotros, criaturas Mías, lo que Me hace ir tras vosotros, aunque vosotros os alejéis de Mí.... Pero quiero hacer que volváis a Mí, que regreséis a Mí.... debéis deteneros en el camino que os aleja de Mí y comenzar lentamente el camino de regreso.... debéis pensar en lo que os dice vuestro Padre y seguir lo que os aconseja y exige.

Y bendito seáis si Me escucháis y tomáis en serio Mis Palabras.... benditos seáis si reconocéis la voz de vuestro Padre en las Palabras que escucháis, y si reaccionáis como niños. Entonces Mi presencia con vosotros se hará permanente, querréis escucharme en todo momento y mediante vuestra voluntad Me obligaréis a estar con vosotros y a establecer residencia en vosotros, porque ciertamente también vuestro deseo por Mí se cumplirá, porque os amo y también anhelo vuestro amor....

Y ese es el mayor cumplimiento de Mi amor cuando vosotros mismos venís a Mi encuentro, cuando os sentís atraídos a Mí en vuestros corazones, cuando Mi amor por vosotros encuentra respuesta y deseáis hablar constantemente Conmigo.... Entonces la separación entre nosotros es verdaderamente eliminado y entonces el niño ha encontrado el camino de regreso a la casa del Padre, ha aterrizado en Mi corazón y ahora permanecerá Conmigo para siempre.

Y esto sólo puedo lograrlo a través de Mi Palabra, desde la cual sentía Mi amor por vosotros, que encuentra resonancia en vuestros corazones y que por eso obedecéis y con ello también sentís su efecto de fuerza.... Entonces también seréis y permaneceréis conscientes de Mi presencia, entonces vosotros mismos estableceréis el vínculo íntimo Conmigo, que forma parte de la correcta relación entre un hijo y su Padre. Me amaréis con todo vuestro corazón y os acercaréis cada vez más al corazón del Padre hasta que se haya llevado a cabo la unificación completa, hasta que el niño haya regresado a casa del Padre, de Quien una vez emanó....

amén