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La Luz descendió a la Tierra

El mundo se encontraba en cadenas... Comprended que ningún ser humano que pasó por la Tierra y que vivía en el mundo de Lucifer –el mundo que conservaba lo espiritual caído– podía liberarse de las cadenas de Satanás. Este mantuvo a todos atados y eternamente nunca los habría soltado porque él no alimentaba amor alguno. Pues en él sólo había odio y oposición contra Mí que soy el eterno Amor del cual también él había surgido.

El mundo se encontraba en cadenas... y por eso Yo mismo descendí a la Tierra para romper estas ataduras... para reventarlas... para ayudar a los caídos para que pudieran volver a las Alturas... para salvar los hombres del poder de Satanás.

Que Yo había descendido a la Tierra fue una Obra de máxima Misericordia, porque los hombres mismos tenían la culpa de su estado de desgracia, dado que hace tiempos remotos ellos le habían seguido voluntariamente. Se hallaban en tinieblas, y ni la menor Luz tuvo acceso a estos caídos. Por eso Yo mismo me compadecía de ellos y les encendí una Luz para mostrarles el camino que lleva a Mí - el camino de regreso a su Padre al que hace tiempos remotos habían abandonado voluntariamente. Por eso la Luz misma había descendido a la Tierra...

La eterna Luz se encarnó en un Niño para emprender el camino como Hombre en esta Tierra, de modo que el Niño Jesús se hizo Envoltura para Mí... Me serví de la forma humana para llevar a cabo la Obra de Redención... para vencer a mi adversario en guerra abierta y arrancarle todas aquellas almas que tenían la voluntad y el deseo de regresar a Mí...

Yo pagué el precio de compra para estas almas... Yo sacrifiqué mi Vida en la cruz... Yo rescaté estas almas de mi adversario... con mi Sangre... Pues Yo emprendí el camino por la Tierra como Hombre, con el Nacimiento del Niño Jesús, que aconteció de una manera tan extraordinaria - ya porque este Hombre Jesús también tenía que cumplir con una Misión extraordinaria: Servirme a Mí mismo de Envoltura porque la humanidad pecaminosa no habría podido soportarme en la Plenitud de mi Luz, por lo que la Luz desde la eternidad tenía que cubrirse.

Aun así el Niño Jesús ya irradiaba una Luz extraordinaria - pero solamente visible a aquellos que por un modo de Vida en el amor eran aptos a soportar la Luz... los que por eso también estaban admitidos en mi Cercanía, pues Yo sabía quienes tenían esta madurez. A estos los atraje a Mí - los que ahora me homenajeaban a Mí como Niño en el pesebre como a su rey, porque sus simples almas me reconocieron y me adoraron.

Y mi Nacimiento se realizó encubiertamente porque la Plenitud del Espíritu que penetró al niño Jesús cuando nació permitió los acontecimientos más sobrenaturales; de modo que algunos pocos podían reconocer que las predicciones de muchos profetas estaban cumpliéndose... los que anunciaron al Mesías que iba a traer la Salvación a muchos hombres que se encontraban en gran tribulación.

Aquellos que todavía creían en un Dios y cuyos corazones estaban dispuestos a actuar en el amor, ellos esperaban a su Mesías ardientemente, y tras mi Nacimiento sus esperanzas se les cumplieron. Pero ellos no sabían que Yo mismo había descendido a la Tierra... pues no sabían que su Dios y Creador se encontraba en el pesebre delante de ellos - aunque se hayan sentido conmovidos por un temor sagrado y todo su ser los haya empujado hacia el Niño en el pesebre. Pues desde el Niño les llegó la Irradiación de mi Amor, el que conmovió sus corazones...

Mi Misión empezó distribuyendo Amor, para despertar de esta manera el amor recíproco en los seres humanos. Me cargué con la vida como Hombre... me adapté a todas las leyes naturales... conscientemente fui por un camino terrenal cuya Finalidad era el calvario en la cruz... y aunque de vez en cuando se haya traslucido y manifestado mi Espíritu, Yo tenía ninguna ventaja ante los demás seres humanos, porque tenía que esforzarme a sobreponerme a todo lo no-espiritual que me asediaba, igual que esto está exigido de vosotros los hombres; porque Yo quería vivir ante vosotros una Vida ejemplar - la Vida que corresponde a la Voluntad del Padre que estaba en Mí...

Yo también tenía que formar y espiritualizar mi cuerpo carnal de manera que el eterno Amor pudiera tomar morada en él. Y mi paso por la Tierra me ofreció continuamente ocasión para ello... pues he realizado mi Vida como “Hombre” para que vosotros los hombres sigáis mi Ejemplo y preparéis vuestro cuerpo humano para servir de recipiente para el Espíritu divino... Tal como también Yo lo debía hacer en mi Infancia y en los años antes de mi Actividad - de la propia Enseñanza.

Y el Padre ha tomado morada en el Hombre Jesús que se había formado de tal manera que me servía de paradero; de modo que Yo como Hombre Jesús así estaba “colmado del Espíritu”, y enseñaba y hacía milagros porque el Padre mismo estaba en Mí - lo que cada uno puede conseguir si tan sólo tiene la seria voluntad de servir al Espíritu divino de receptáculo en el que este puede derramarse.

Entonces también cada ser humano es capaz de liberarse de las ataduras del adversario, porque tan pronto como en Jesucristo ha establecido la conexión conmigo, Yo mismo suelto estas ataduras y le libero. Porque Yo he pasado por la Tierra para redimir a los seres humanos... Yo les he traído la Luz para que ahora también encuentren el camino que lleva a Mí y para que puedan irlo - el camino del regreso a la Casa Paternal.

Amén.

Das Licht stieg herab zur Erde....

Die Welt lag in Banden.... Verstehet es, kein Mensch konnte sich frei machen aus der Fessel des Satans, der über die Erde ging, der in der Welt Luzifers lebte, die das gefallene Geistige barg.... Er hielt sie gefesselt, und er hätte sie auch ewig nicht freigegeben, denn in ihm war keine Liebe, in ihm war nur Haß und Widerstand gegen Mich, Der Ich die ewige Liebe bin und aus Dem auch er hervorgegangen war.... Die Welt lag in Banden.... und darum bin Ich Selbst zur Erde niedergestiegen, um diese Banden zu lösen, um die Fesseln zu sprengen, um dem Gefallenen zu helfen, wieder zur Höhe zu gelangen.... um die Menschen zu erlösen aus seiner Gewalt. Daß Ich zur Erde niederstieg, war ein Werk größter Barmherzigkeit, denn es waren die Menschen aus eigener Schuld in diesem Zustand der Unseligkeit, weil sie einst ihm freiwillig gefolgt waren. Sie befanden sich in der Finsternis, und kein Lichtlein fand Zugang zu diesem Gefallenen, wenn Ich nicht Selbst Mich erbarmte und ihnen ein Licht anzündete.... um ihnen den Weg zu zeigen, der zu Mir führt, zurück zu ihrem Vater, Den sie einst freiwillig verlassen hatten. Darum stieg das Licht Selbst zur Erde.... Das Ewige Licht verkörperte Sich in einem Kindlein, um den Weg als Mensch anzutreten auf dieser Erde, und das Kindlein Jesus wurde Mir zur Hülle.... Es war die menschliche Form, derer Ich Mich bediente, um das Erlösungswerk zu vollbringen, um Meinen Gegner im offenen Kampf zu besiegen und ihm die Seelen abzuringen, die den Willen und das Verlangen hatten, zu Mir zurückzukehren.... Ich zahlte für diese Seelen den Kaufpreis, Ich gab Mein Leben hin am Kreuz, Ich kaufte sie los von Meinem Gegner mit Meinem Blut.... Ich trat also den Erdenweg als Mensch an mit der Geburt des Jesusknaben, die darum schon ungewöhnlich vor sich ging, weil dieser Mensch Jesus auch eine ungewöhnliche Mission zu erfüllen hatte: Mir Selbst als Hülle zu dienen, weil die sündige Menschheit Mich in Meiner Lichtfülle nicht hätte ertragen können und darum das "Licht von Ewigkeit" Sich verhüllen mußte. Dennoch strahlte schon das Kindlein Jesus ungewöhnliches Licht aus, doch nur denen schaubar, die durch einen Lebenswandel in Liebe fähig waren, das Licht zu ertragen, und die deshalb auch in Meine Nähe zugelassen wurden, denn Ich wußte es, wer diese innere Reife besaß, und zog die wenigen Menschen zu Mir, die Mir nun als Kindlein in der Krippe huldigten wie ihrem König, denn ihre einfachen Seelen erkannten Mich und beteten Mich an. Und es spielte sich Meine Geburt im Verborgenen ab, denn die Geistfülle, die das Kindlein Jesus bei Seiner Geburt durchstrahlte, ließ die wundersamsten Geschehen zu, und so konnten einige wenige erkennen, daß sich die Ankündigungen vieler Propheten erfüllten, die den Messias voraussagten, Der den Menschen Rettung bringen sollte in tiefster Not. Die noch an einen Gott glaubten und deren Herzen liebewillig waren, die erwarteten ihren Messias mit Sehnsucht, und ihnen erfüllten sich ihre Hoffnungen durch Meine Geburt.... Aber sie wußten nicht, daß Ich Selbst zur Erde niedergestiegen war, sie wußten es nicht, daß ihr Gott und Schöpfer vor ihnen in der Krippe lag.... wenngleich sie von einem heiligen Schauer ergriffen waren und ihr ganzes Wesen zu dem Kindlein drängte, Das in der Krippe lag. Denn es strahlte ihnen aus dem Kindlein Meine Liebe entgegen, die ihre Herzen berührte.... Und es begann Meine Mission, Liebe auszuteilen und dadurch in den Menschen Gegenliebe zu erwecken. Ich nahm das Leben als Mensch auf Mich, Ich paßte Mich allen Naturgesetzen an, Ich ging bewußt einen Erdenweg, dessen Ziel das Leiden und Sterben am Kreuz gewesen ist. Und wenn auch zuweilen der Geist aus Mir durchbrach und sich äußerte, so hatte Ich doch den anderen Menschen nichts voraus, denn Ich mußte alles Ungeistige, das Mich bedrängte, genau so zu überwinden suchen, wie es euch Menschen zur Aufgabe gestellt ist, denn Ich wollte euch das Leben vorleben, das dem Willen des Vaters entsprach, Der in Mir war.... Ich mußte auch Meinen fleischlichen Körper so gestalten und vergeistigen, daß die Ewige Liebe darin Aufenthalt nehmen konnte. Und Mein Erdenwandel bot Mir ständig dazu Gelegenheit, habe Ich doch Mein Leben als "Mensch" zurückgelegt, weil ihr Menschen alle Meinem Beispiel folgen solltet und euren menschlichen Körper herrichten sollet zu einem Gefäß für den göttlichen Geist.... wie Ich es also auch tun mußte und getan habe in der Kindheit und in den Jahren vor Meiner eigentlichen Lehrtätigkeit.... Und es hat der Vater Wohnung genommen in dem Menschen Jesus, Der Sich so gestaltet hatte, daß Er Mir zum Aufenthalt diente, daß Ich also als Mensch Jesus "voll des Geistes" war, daß Ich lehrte und Wunder wirkte, weil der Vater Selbst in Mir war.... was jeder Mensch erreichen kann, wenn er nur den ernsten Willen hat, dem göttlichen Geist als Gefäß zu dienen, in das er sich verströmen kann, und dann ist auch jeder Mensch fähig, sich aus den Banden des Gegners zu befreien, denn sowie er die Verbindung mit Mir in Jesus Christus eingegangen ist, löse Ich Selbst die Fesseln und mache ihn frei.... Denn Ich bin über die Erde gegangen, um die Menschen zu erlösen.... Ich habe den Menschen das Licht gebracht, daß sie nun auch den Weg finden und gehen können, der zurückführt zu Mir, zurück ins Vaterhaus....

Amen