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Los desafíos del oponente.... Los temores de Jesús en el Monte de los Olivos

Tendréis que demostrar vuestra valía más a menudo, porque las tentaciones no desaparecerán hasta el final. Pero también debéis considerar que los dones inusuales de gracia os harán más fáciles soportar todo, que también recibiréis una cantidad significativa de fuerza a través del suministro de Mi Palabra desde arriba, a lo que tengo que decir una y otra vez, que vuestra alma verdaderamente siente está fuerza, incluso si estáis físicamente muy débiles y creéis que no sois lo suficientemente fuertes como para resistir.

Yo estoy a vuestro lado, no os dejaré solos, sé de vuestras luchas y de vuestras necesidades espirituales, sé de vuestras necesidades físicas y debilidades, pero os he prometidos Mi ayuda si tan sólo recurrís a Mí, y Yo ciertamente también os concederé esta ayuda, porque os amo y no quiero perderos ante Mi oponente, que juega con vosotros de manera inconfundible para conquistaros. Pero no le permitáis este triunfo, sino simplemente dirigidos hacia Mí y Yo os ayudaré.

Es precisamente el esfuerzo espiritual lo que él busca detener y obstaculizaros en todos los sentidos y si sabéis esto, debéis esforzaros con mayor fuerza, orando primero sólo para fortaleceros en vuestra debilidad.... y visiblemente llegará a vosotros, sólo que eso requiere superación de vosotros y esta debe ser lograda por vuestro libe albedrío. Pero una victoria gloriosa os será concedida, porque el alma se beneficia de cada lucha que ha superado, aunque vosotros mismos sólo podéis experimentar el sentimiento de una plenitud de amor hacia Mí; pero siempre os haréis más fuertes y seguiréis siendo vencedores de él....

Y recordad Mi obra de Redención y las fuertes tentaciones que tenía antes.... El oponente también trato de controlarme, también trató de impedirme la obra que Yo quería realizar, también me había llenado con el sentimiento de la más profunda debilidad y Me quitó toda la fe en Mi fuerza de resistencia. Y oré como ser humano y experimenté fortalecimiento y así llegué a ser vencedor sobre él, porque Mi voluntad era fuerte para redimiros a vosotros, los humanos. Y mientras dirijáis vuestra voluntad hacia Mí, no debéis temer que Yo os deje en manos de Mi oponente. Lucharé con él por vuestra alma, y en verdad, la ganaré para Mí por toda la eternidad....

amén

Aggressioni dell’avversario - Le paure di Gesù sul Monte degli ulivi

Dovrete ancora sovente affermare, perché le aggressioni non cesseranno fino alla fine. Ma dovete anche pensare che degli insoliti Doni di Grazia ve lo renderanno facile resistere a tutto, che attraverso l’apporto della Mia Parola dall’Alto ricevete anche una significativa misura di Forza, per cui devo sempre di nuovo dire, che la vostra anima percepisce questo veramente, persino quando vi trovate corporalmente in grande debolezza e credete di non essere abbastanza forti per la resistenza. Io vi assisto, non vi lascio soli, conosco la vostra lotta e le miserie delle vostre anime, conosco le vostre miserie e debolezze corporee, ma vi ho promesso il Mio Aiuto, se soltanto vi rivolgete a Me e vi concederò questo Aiuto anche visibilmente, perché vi amo e non vi voglio perdere al Mio avversario, che in modo non rinnegabile ordisce il suo gioco con voi per conquistarvi. Ma non lasciategli questo trionfo, ma rivolgetevi semplicemente a Me e vi aiuterò. Lui cerca proprio ad impedire questo tendere spirituale ed ostacolarvi in ogni modo e se lo sapete, dovete adoperarvi con Forza accresciuta, mentre dapprima pregate soltanto per la fortificazione nella vostra debolezza, e vi verrà data visibilmente, ma questo richiede soltanto il vostro superamento, e questa la deve esercitare la vostra libera volontà. Ma avrete una meravigliosa vittoria, perché l’anima ha il suo vantaggio da ogni battaglia sostenuta, se voi stessi potete anche soltanto registrare la sensazione di essere colmati d’amore per Me; ma diventerete sempre più forti e rimarrete vincitori su di lui. Pensate alla Mia Opera di Redenzione e le forti aggressioni prima. L’avversario cercava di conquistare il dominio anche su di Me, ha cercato anche Me di trattenerMi dall’Opera che volevo compiere, aveva colmato anche Me con la sensazione di profondissima debolezza e Mi ha tolto ogni fede nella Mia Forza di Resistenza. E come Uomo pregavo e ricevevo la Fortificazione e così Sono diventato Vincitore su di lui, perché la Mia Volontà era forte per redimere voi uomini. E finché rivolgete a Me la volontà non dovete temere che vi lascio al Mio avversario. Lotterò con lui per la vostra anima ed in Verità, la conquisterò per Me per tutta l’Eternità.

Amen