7317 Los desafíos del oponente.... Los temores de Jesús en el Monte de los Olivos

26 de marzo de 1959: Libro 77

Tendréis que demostrar vuestra valía más a menudo, porque las tentaciones no desaparecerán hasta el final. Pero también debéis considerar que los dones inusuales de gracia os harán más fáciles soportar todo, que también recibiréis una cantidad significativa de fuerza a través del suministro de Mi Palabra desde arriba, a lo que tengo que decir una y otra vez, que vuestra alma verdaderamente siente está fuerza, incluso si estáis físicamente muy débiles y creéis que no sois lo suficientemente fuertes como para resistir.

Yo estoy a vuestro lado, no os dejaré solos, sé de vuestras luchas y de vuestras necesidades espirituales, sé de vuestras necesidades físicas y debilidades, pero os he prometidos Mi ayuda si tan sólo recurrís a Mí, y Yo ciertamente también os concederé esta ayuda, porque os amo y no quiero perderos ante Mi oponente, que juega con vosotros de manera inconfundible para conquistaros. Pero no le permitáis este triunfo, sino simplemente dirigidos hacia Mí y Yo os ayudaré.

Es precisamente el esfuerzo espiritual lo que él busca detener y obstaculizaros en todos los sentidos y si sabéis esto, debéis esforzaros con mayor fuerza, orando primero sólo para fortaleceros en vuestra debilidad.... y visiblemente llegará a vosotros, sólo que eso requiere superación de vosotros y esta debe ser lograda por vuestro libe albedrío. Pero una victoria gloriosa os será concedida, porque el alma se beneficia de cada lucha que ha superado, aunque vosotros mismos sólo podéis experimentar el sentimiento de una plenitud de amor hacia Mí; pero siempre os haréis más fuertes y seguiréis siendo vencedores de él....

Y recordad Mi obra de Redención y las fuertes tentaciones que tenía antes.... El oponente también trato de controlarme, también trató de impedirme la obra que Yo quería realizar, también me había llenado con el sentimiento de la más profunda debilidad y Me quitó toda la fe en Mi fuerza de resistencia. Y oré como ser humano y experimenté fortalecimiento y así llegué a ser vencedor sobre él, porque Mi voluntad era fuerte para redimiros a vosotros, los humanos. Y mientras dirijáis vuestra voluntad hacia Mí, no debéis temer que Yo os deje en manos de Mi oponente. Lucharé con él por vuestra alma, y en verdad, la ganaré para Mí por toda la eternidad....

amén

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