8306 Simpatía y antipatía....

22 de octubre de 1962: Libro 87

Cualquier pregunta espiritual que os mueva debe ser respondida, porque quiero que caminéis en la luz, pero también quiero que pidáis la luz de Mí. Y quiero explicaros a qué corrientes espirituales estáis sujetos en relación con vuestros semejantes y cómo estas corrientes os afectan.

Tenéis que saber que todas las personas, mientras no estén redimidas, todavía están en las pandillas del oponente, que están atadas y dependiendo de su estado de madurez, que está determinado solo por su grado de amor, también están influenciados por Mi oponente, que están más o menos sujetos a su influencia y esto también se expresa en su naturaleza. Y es comprensible que los mismos tipos de ser se atraigan entre sí, es decir, el hombre siempre busca el apego a otras personas que revelen el mismo tipo de ser. Porque estas personas le atraen, le son simpáticas, mientras que las personas completamente opuestas no les gusta, es decir, son antipáticas.

Por lo tanto, esta explicación es la más cercana, que también será bien comprensible para todos. Pero también hay hombres cuyas almas son más aclaradas cuando comienzan su vida terrenal como seres humanos, que en su pre desarrollo en un estado obligado se han sometido más obedientes a todos los requisitos, cuya resistencia ha disminuido tanto que comienzan su vida como seres humanos en un estado de madurez superior y, por lo tanto, también muestran más amor....

Pero el amor siempre tendrá un efecto benévolo a los demás, e incluso las cosas espirituales muy inmaduras, que los demás seres humanos a menudo muestran es calmado por el amor, por lo que se puede explicar que una atmosfera que irradia de los primeros, lo que también se puede llamar simpatía y, que tiene un efecto beneficioso en otros seres humanos, porque a ese hombre no se opone a la resistencia y la influencia siempre será favorable, que también lleva un efecto en las personas menos maduras y, a veces aumentarán el grado de amor.

El amor despierta el amor mutuo.... Y a esas personas amorosas solo se enfrentan hombres completamente inmaduros, que entonces también tocan ser antipáticos para ellas.... además, todos los hombres se mueven en una esfera que corresponde a su grado de madurez que siente el semejante que es sensible. Porque si esta esfera está densificada por esencias opuestas, entonces el hombre todavía está completamente bajo la influencia del oponente, y luego también repelerá a aquellos hombres que están más avanzados en su desarrollo.... no habrá armonía, porque el hombre resiste a tales corrientes que son contrarias a su esfuerzo y sentimiento.

Entonces la simpatía y la antipatía solo pueden explicarse con corrientes espirituales, porque cada persona tiene su propia esfera en la que se siente cómodo, y se siente incómodo por algo que no corresponde a esta esfera.... y solo unos pocos hombres están tan profundamente anclados en sí mismos con el amor divino que emiten una irradiación extremadamente fuerte, que lo espiritual inmaduro también puede sentirse tocado y, por lo tanto, no contrarresta conscientemente a los primeros. Los contrastes de los rasgos de carácter, que también se deben a la pre encarnación, también determinan el grado de afecto o defensa de los hombres entre sí.... porque lo que uno ya puede haber rechazado hace mucho tiempo todavía puede estar presente en gran medida en el otro y también puede dar lugar a un sentimiento de defensa interna....

Pero si el amor sea fortalecido en un hombre, tendrá paciencia con las debilidades y vicios del otro y tratará de influir en él de la manera más favorable, y esto de verdad ya es un servicio al prójimo, es una obra de amor al prójimo de la mayor importancia.... Porque la esfera del amor de una persona puede tener un efecto estimulante en el prójimo y despertar el amor nuevamente en él, y dado que el amor es el único solvente de todo mal, el amor también debe ser llevado hacia el enemigo, y verdaderamente, vosotros los humanos viviréis en la tierra para la bendición de vuestro entorno....

No debéis retiraros de las personas que no os tocan con simpatía, sino tratar de ejercer una influencia favorable sobre ellos.... solo si se enfrentan hostiles hacia vosotros, entonces evitadlos, porque entonces Mi oponente intentará derribaros con ellos, y entonces aún no ha llegado el momento para ellos para que cambien sus sentidos. Y luego tratar con ellos solo puede causar daño, porque no aceptarán nada de vosotros, sin importar si queréis ayudarlos espiritualmente o terrenal, porque entonces Mi oponente mismo está detrás de ellos y lo sentéis esto al huir de esas personas y pedirme protección ante ellos.

Lo espiritual en vosotros, vuestra alma, está más o menos tocado por las corrientes que provienen de vuestros semejantes, y tan pronto como este espiritual mismo ya puede mostrar un mayor grado de madurez, Mi oponente ya lo está presionando y hace uso de esas personas que todavía lo obedecen, y la defensa del alma es bastante comprensible porque se ha separado del enemigo y tampoco quiere tener nada que ver con sus seguidores....

Pero si el alma misma posee un gran amor, entonces también puede tener éxito en obrar favorablemente con una persona inmadura, entonces ella también se rendirá, y entonces se ha conseguido una obra grande que el amor ha logrado, para lo cual nada es imposible.... pues el amor es una fuerza a la que ningún ser humano puede resistir a la larga, y solamente rara vez se puede encontrar ese amor entre los hombres en la tierra.... por eso es difícil amar al enemigo, pero no imposible, de lo contrario, Jesús no habría predicado el amor al enemigo, lo que requiere un alto grado de amor, pero también traerá una gran ganancia espiritual, tanto para el dador como para el receptor....

Amén

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

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