5599 La penuria de las almas apartadas.... el amor de la ayuda humana....

11 de febrero de 1953: Libro 61

Ningún hombre puede medir la pena en la cual se encuentran las almas apartadas de la tierra, que son incrédulos o débiles en su fe, nadie puede hacerse una imagen del estado penoso de lo cual no pueden salir sin ayuda, porque se encuentran sin fuerza ninguna. Ningún hombre sabe que magnitud de amor hace falta para consolarlos en su penuria y que poco amor les sigue a la eternidad, porque los hombres mismos son sin amor y pocos, que han dejado atrás, piensan en aquellos que se han ido. Si supieran los hombres que gratitud tienen frente a los pensamientos cariñosos de los hombres terrestres y cómo los afecta, si supierais qué bondad son aquellos pensamientos de amor para las almas, os forzaríais mucho más de ayudarles, si supierais del estado pensos de almas cercanas a vosotros. Pero vuestra creencia en una vida seguida es débil, y sois mal informados si creeis que no podéis ayudarles si estáis pensando que las almas siguen viviendo en el más allá. Solo vosotros podéis ayudarles con afán, porque vuestro amor sale con mucha fuerza hacia aquellas almas, y vuestro amor puede despertar amor en aquellas almas y llevarles con esto de la oscuridad espiritual a esferas más claras de donde pueden empezar seguramente con su alze. Los hombres tienen un remedio seguro a mano, pero no la apliquan, y aquellos que les quieren regalar amor, las almas del reino de la luz, no encuentran acceso fácil a las almas, porque tienen que acercarse en el mismo disfraz de las almas mismas para no forzarlos automáticamente a la aceptación de la luz.... Pero las almas que se han muerto sin creencia, les ha faltado el amor en la tierra y con esto también cualquier conocimiento.... Por esto difícilmente aceptarán lo que los seres luminosos les ofrecen, porque su voluntad está debilitada completamente por su falta de fuerza. Aquellos seres no les pueden transmitir fuerza a través de su amor, porque va contra la ley del orden divino.... Pero el amor del hombre terrestre es aceptado por Dios.... Y por esto, por el bien de aquel amor, Dios puede dar Su amor bendito.... Transmite amor a las almas de Su fuente eterna de amor, Él acepta los ruegos cariñosos y ayuda donde falta fuerza al hombre. Hombres, pensad en aquellas almas pobres y dadles por lo que ruegan una y otra vez, si se meten en vuestros pensamientos.... Prestad atención a estas llamadas de auxilio y escucharles.... mandadles amor y buenos pensamientos, apuntad a Jesucristo, en El cual no quisieron creer en la tierra. Al mismo tiempo llamad a Él y rogad por aquellas almas. Pero que no sea una petición sin corazón, porque solo el amor puede salvar, tener efecto fortalecido, y todas las almas os piden este amor que deben sufrir en el más allá.... Y vosotros mismos no sabéis en qué estado vuestros queridos han salido de la tierra, y por esto no dejad a nadie sin conmemorar, aquel que se acerca a vosotros en vuestros pensamientos y que quiere comunicar su petición.... Nunca olvidarlos, y no penséis que se han desvanecido.... “Ellos viven", pero en qué estado.... No tienen que perderse si vosotros tenéis compasión con ellos y sí prestáis vosotros la fuerza salvadora; podéis ayudar.... Por esto tened compasión con todos los incrédulos que ya no tienen su estancia en la tierra, pero que todavía existen, porque su alma es inmortal y no puede desaparecer.... Y os darán las gracias eternamente....

amén

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