4888 Los muertos resucitarán.... Culpa de pecado....

1 de mayo de 1950: Libro 55

El pecado será revelado en el último día.... Los muertos también resucitarán en sus obras, es decir, las almas que están espiritualmente muertas mirarán hacia atrás y experimentarán cada mala acción, cada mal pensamiento y voluntad que dejaron surgir en su vida terrenal, como si estuvieran escritos con letra de fuego, y entonces el alma reconocerá su propia dureza y también que no es digna para una vida en el reino de la luz, porque sólo será agradable a Dios cuando haya cumplido con Sus deseos y decretos en la tierra. (3.5.1950) Los muertos resucitarán.... Nada permanecerá oculto, el bien y el mal serán revelados, todo lo que el hombre ha hecho y pensado en la tierra saldrá a la luz, y ay de aquellos cuyas acciones fueron malas.... Todo pecado encontrará su retribución, siempre que no haya sido borrado por Jesucristo, es decir, que ya fue perdonado en la tierra porque el ser humano, reconociendo su culpa, lo llevó a la cruz de Cristo y le pidió la absolución. Estos son redimidos del pecado a través del amor y la gracia excesivos de Jesús. Y estos no deben temer el juicio final. Pero qué pocos son.... La fe en Jesucristo y en su acto de Salvación es realmente tan rara de encontrar, pues las meras palabras no dan todavía testimonio de ella mientras no esté viva por el amor. De ahí que sólo puedan considerarse redimidos por la sangre de Cristo aquellas personas que viven una vida de amor.... que encontraron a Jesucristo por amor y se encomendaron a Él en su adversidad espiritual. Porque sólo el amor lo reconoce como Dios y Redentor del mundo; pero quien no tiene amor en su interior sólo dice palabras vacías cuando profesa su fe en Jesucristo. Quien no tiene amor en su interior no se acercará a Él con profunda humildad y le confesará su culpa, porque quien no tiene amor en su interior sigue siendo esclavo del adversario de Dios que se opone a Jesucristo y así impide que su corazón se vuelva hacia Él. Y por lo tanto mucho pecado será revelado en el último Juicio, sólo unos pocos pertenecerán a los redimidos por la sangre de Jesucristo, y la culpa de pecado de la gente será enorme cuando los muertos se levanten de las tumbas para justificar sus acciones y pensamientos, es decir, cuando las almas de aquellos tendrán que confesar su culpa porque nada permanecerá ya en secreto lo que una vez sucedió.... Todos los que murieron sin Jesucristo, todos los que no lo reconocieron en la tierra y, por tanto, no se beneficiaron de las bendiciones del acto de Salvación, tendrán que responder por sí mismos, pues sin una fe viva en Él seguirán habitando en las más profundas tinieblas del más allá, aunque pasen tiempos interminables. Porque no pueden ascender sin Jesucristo porque no tienen amor en su interior e incluso en el más allá una ascensión sólo es posible a través del amor. Incluso en el más allá todavía tienen la oportunidad de reconocer a Jesucristo, sin embargo, sólo unos pocos se transforman en amor por su propia voluntad, sólo unos pocos se agarran a la mano de su Redentor salvador cuando desciende a ellos para ayudarles a ascender a Sí mismo.... Sin amor no lo reconocen y no se dejan ayudar por Él. Porque el pecado los arrastra y los retiene en las profundidades como con cadenas. Sólo uno puede librarlos de ella, y no reconocen a ese uno en la ceguera que es consecuencia de la pecaminosidad. Pero el juicio final separará los espíritus. Incluso entonces la mano del Padre misericordioso se extenderá hacia los pecadores, y quien la agarre y se deje arrastrar se salvará del castigo del infierno de un nuevo destierro en la materia sólida de la nueva tierra. El pecado será revelado y también la voluntad de los que han pecado, y el destino de las almas será de acuerdo con esta voluntad después del último Juicio, porque Dios es un Dios de amor y misericordia pero también un Dios de justicia....

Amén

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

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