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Il legame con Gesù Cristo

Potete pronunciare in ogni tempo il Nome del Signore e troverete sempre Ascolte da Lui, perché Egli attende soltanto che rivolgiate i vostri pensieri a Lui e che possa effondere nel vostro cuore il Suo Raggio d’Amore, perché questo avviene attraverso la dedizione dei vostri pensieri a Lui. Ogni pensiero spirituale è il contatto vostro con il Regno di Luce. Ogni pensiero a Lui, vostro Dio e Padre in Gesù Cristo, è un legame con Lui, che per voi è sempre la cosa più preziosa, perché ogni legame vi procura Forza e Luce, che la vostra anima percepisce in modo benevolo, anche se il corpo non potrà sentirlo. Perciò anche nelle più piccole miserie dovete rivolgervi a Gesù Crsito, perché così stabilite sempre il legame con Lui, che non rimarrà mai senza successo. Le molte piccole miserie nell’esistenza umana vi devono sempre di nuovo soltanto indurre di rivolgervi a Lui, perché Egli vuole che pensiate a Lui sempre ed ovunque e perché il vostro legame non può essere mai abbastanza intimo, se volete sperimentarne una grande Benedizione.

Dovete arrivare al punto di percorrere le vostre vie soltanto ancora con Lui, affidando tutto a Lui, senza intraprendere nulla senza di Lui, che chiedete a Lui il Consiglio, qualunque cosa facciate, che non camminate più da soli, ma accompagnati costantemente da Colui Che vuole Essere e Rimanere la vostra Guida sulla via della vostra vita terrena, perché allora raggiungerete anche sicuramente la vostra meta. Anche se le vostre faccende sono piccole, il legame con Lui è l’unica cosa importante ed anche le più piccole faccende vi devono indurre a questo, ed il vostro Padre avrà il Suo Compiacimento in voi, con i quali Egli desidera Essere unito per tutta l’Eternità, perché una volta vi siete liberamente separati da Lui e perciò dovete di nuovo liberamente ritornare a Lui. Dovete rivolgervi di nuovo a Lui in pensieri, dal Quale vi siete una volta allontanati nel totale abbaglio del vostro pensare.

Come uomo però non potete essere costretti, e perciò state nel mondo con la libera volontà che potete ora orientare anche nel mondo con i suoi fascini, ma allora siete ancora molto lontani da Dio, il Quale però vi vuole riconquistare in eterno. Ogni pensiero che rivolgete a Lui nella vita terrena, è un iniziale ritorno a Lui, a cui ora dovete sempre tendere seriamente, cioè elevare sempre più spesso i vostri pensieri a Colui dal Quale una volta siete proceduti. Per questo però vi rimane la libertà della volontà, perché per amore dovete trovare e percorrere la via verso il Padre, Egli non vi vuole costringere a questo, soltanto perché l’amore è l’unico mezzo di legame che stabilisce di nuovo il rapporto, com’era in principio.

L’amore soltanto unisce il figlio con il Padre, la creatura con il Creatore dall’Eternità. Dio vuole possedere l’amore di voi uomini e perciò vi attira in ogni modo e cerca il vostro amore, anche se questo avviene attraverso miserie di ogni genere, Egli cerca di indurvi a seguire Lui, che poi avviene anche nell’Amore, che il Padre dimostrerà ora in molti modi, affinché Egli conquisti tutto l’amore del figlio e che possa svolgersi l’unificazione che unisce il figlio eternamente con suo Padre. Lasciate volteggiare i vostri pensieri sempre e sempre di nuovo in Alto, a Gesù Cristo, vostro Dio e Padre dall’Eternità, e la vostra vita si svolgerà presto più spiritualmente, vincerete facilmente la vita terrena con tutte le difficoltà e presto vivrete solo più ancora per il Regno spirituale, per il Regno che è la vostra vera Patria in cui entrerete, quando sarà terminato il vostro corso terreno.

Amen

Vinculación con Jesucristo....

Podéis pronunciar el nombre del Señor en cualquier momento y Él siempre os escuchará, porque Él sólo está esperando que dirijáis vuestros pensamientos a Él y pueda bajar Su rayo de amor en vuestros corazones. Porque esto último requiere que vuestro corazón se abra, y esto ocurre dirigiendo vuestros pensamientos a Él. Cada pensamiento espiritual es una conexión entre vosotros y el reino de la luz. cada pensamiento a Él, vuestro Dios y Padre en Jesucristo, es un vínculo con Él, que siempre es lo más valioso para vosotros, porque cada vínculo os trae fuerza y luz, y vuestra alma se siente beneficiosa, aunque vuestro cuerpo no es capaz de sentir algo de eso.

Por eso debéis acudir a Jesucristo hasta en las más pequeñas de la necesidades, porque al hacerlo siempre estableceréis con Él un vínculo que nunca fracasará. Y las muchas pequeñas dificultades de la existencia humana sólo deberían hacer que os dirijáis a Él.... porque Él quiere que Lo recordéis siempre y en todas partes, y como vuestro vínculo no puede ser lo suficientemente íntimo, si queréis experimentar grandes bendiciones de ello. Debéis llegar a tal punto que sólo sigáis vuestros caminos con Él, que Le confiéis todo, que no hagáis nada sin Él, que acudáis a Él en busca de consejo, hagáis lo que hagáis.... que ya no caminéis solos, sino en acompañamiento constante de Aquel, Que quiere ser y seguir siendo vuestro guía en vuestro camino terrenal.... porque entonces ciertamente alcanzaréis vuestra meta.

Y aunque vuestras preocupaciones sean pequeñas.... el vínculo con Él es lo único importante, y hasta las preocupaciones más pequeñas deben impulsaros a hacer esto, y vuestro Padre estará muy complacido con vosotros, con quienes desea estar conectados hasta toda la eternidad. Porque una vez os habíais separado voluntariamente de Él y, por lo tanto, tenéis que regresar voluntariamente a Él.... debéis dirigir vuestros pensamientos a Aquel de Quien una vez os apartasteis en completa ceguera de vuestro pensamientos. Como seres humanos, sin embargo, no se os puede obligar a hacer esto, y por eso estáis en el mundo con el libre albedrío, lo cual ahora también podéis dirigir hacia el mundo y sus encantos, pero entonces todavía estáis muy lejos de Dios, Quien, sin embargo, quiere recuperaros para siempre.

Y cada pensamiento que dirigís a Él en medio de vuestra vida terrenal es el comienzo de un regreso a Él, por el cual debéis esforzaros ahora seriamente cada vez más, es decir, que eleváis cada vez más vuestros pensamientos hacia Él, de Quien una vez surgisteis. Por eso también tenéis el libre albedrío, porque debéis buscar y recorrer el camino hacia el Padre por amor. Él no quiere obligaros a hacerlo, porque sólo el amor es el único aglutinante que restable la antigua relación como lo era al principio....

El amor solo une al niño con el Padre, a la criatura con el Creador desde la eternidad.... Y Dios quiere poseer este amor de vosotros, los humanos, y por eso seduce de todas las maneras y corteja por vuestro amor.... y si esto sucede a través de dificultades de todo tipo, Él intenta que os unáis a Él, lo que luego se realizará en el amor también, lo que ahora el Padre demostrará de muchas maneras para que se gane todo el amor del niño y la unión ya puede tener lugar, que une para siempre el niño a su Padre.

Dejad que vuestros pensamientos divaguen una y otra vez hacia la altura, hacia Jesucristo, vuestro Dios y Padre desde la eternidad.... Y vuestra vida pronto se volverá más espiritual, superaréis fácilmente la vida terrenal con todas sus dificultades, y pronto sólo viviréis para el reino espiritual, para el reino que es vuestra verdadera patria y a la que entraréis cuando vuestra vida terrenal haya terminado....

amén