8999 Jesús descendió a las profundidades después de su muerte en la cruz....

20 de junio de 1965: Libro 94

Cuando Yo caminaba por la tierra Mi pensamiento constante era resguardar a las personas para que no se hundieran en las más profundas tinieblas y evitar que entraran en el limbo, por eso proclamaba constantemente la enseñanza del amor para que a estas personas les fuera fácil creer en Mi acto de Salvación y así la obra de salvar a estas personas ya se habría logrado. Sin embargo, los seres humanos se detenían todos aún demasiado en el mundo terrenal, sólo unos pocos tenían fe en una continuación de la vida, y éstos también fueron receptivos a Mi enseñanza de amor, y les fue fácil reconocerme a Mí mismo porque también pude instruirlos y aceptaron todo como verdad. De ahí que una gran parte de los que me experimentaron a Mí también pudieron entrar en Mi reino como "redimidos", sin embargo, fueron muchos más los que se cerraron a Mi enseñanza, permanecieron sin amor y tuvieron que aceptar su destino en el más allá.... Después de Mi muerte en la cruz ahora también accedí a este reino y allí pude redimir a todos los que estaban en el limbo.... a todas aquellas personas que habían llevado una vida agradable a Dios, pero a las que el Reino de la Luz seguía cerrado porque todavía estaban bajo el peso del pecado original y, por tanto, tenía que realizarse primero Mi obra de redención.... Y a éstos vine ahora como el "hombre Jesús", pues tampoco estaba permitido forzarlos a ellos a la fe, sino que me presenté entre ellos en Mi forma sufriente, de modo que muchos también se hicieron la pregunta: Si Tú eres el Mesías, que nos fue prometido, ¿por qué Tu poder no impidió esto.... por qué tuviste que sufrir esta horrible muerte en la cruz? Porque me esperaban a Mí, a Aquel que les fue prometido como Salvador. Y ellos también tuvieron que seguirme por su propia voluntad, y tampoco fue difícil convencerlos de que Yo era el Mesías prometido.... Pero ahora siguió también Mi descenso al infierno.... a la región donde también quería llevar la redención del pecado original.... Pero allí tuve menos éxito en convencer a las almas, precisamente porque Me presenté ante ellas en la misma forma y fui visible para ellas como el "vencido", a quien negaron todo poder y a quien, por tanto, tampoco quisieron reconocer. Pero a todo aquel que lo deseaba se le permitía unirse a Mí y le liberé de sus grilletes. Y una y otra vez desciendo al abismo para encender una pequeña luz para todos, para que recuerden momentáneamente a Aquel que una vez se les apareció y para que su resistencia sea cada vez menor, para que también ellos se dejen redimir por Su amor, ellos que antes eran obcecados y sólo tenían palabras de odio y de burla para Mí. Sin embargo, Mi amor no les guarda ningún rencor, Mi amor se preocupa siempre de que todo se salve, de que nadie vuelva a caer en los grilletes de quien los poseyó durante tanto tiempo y de que Mi acto de Salvación tampoco se haya realizado en vano para ellos. Pero no puedo impedirlo si su resistencia contra Mí es tan grande que todos los esfuerzos de Mi parte son infructuosos, porque Yo no obligo a nadie a reconocerme, sólo doy a todos las mayores oportunidades para encontrar su camino hacia la luz. Y así ustedes, los humanos, también Me proporcionan una gran ayuda a través de sus oraciones por estas almas, pues una y otra vez se liberan algunas que son tocados por el poder de la oración y pueden ser guiados ahora a la luz. Y con gran gratitud estas almas se unirán ahora igualmente y atraerán a otras almas hacia fuera del abismo.... ya que se conocen entre sí y también saben qué recelos prevalecen todavía en estas almas, y tratan de disipar estos recelos. Si es posible que primero tomen nota de Mi mayor obra de misericordia, entonces también volverán a sí y tratarán de llegar a Mí.... Y entonces el perdón de su gran culpa es seguro, entonces la puerta del reino de la luz también se abrirá para ellos y un largo estado de tormento habrá terminado. Pero los que no están dispuestos volverán a ser presa de un nuevo destierro al final, pues un día también tendrán que volver a tomar conciencia de sí mismos como seres humanos y tomar una decisión.... Y así el camino a través de la tierra puede ciertamente ser recorrido más de una vez, y un día la voluntad de esos seres ciertamente se volverá hacia Mí, un día la hora de la redención también sonará para ellos....

Amén

Traducido por: J. Gründinger

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