Comparar anuncio con traducción

Otras traducciones:

Vivir en el amor - Obrar espiritual - La S. Escritura

Por eso vivíd en el amor, para que Mi Espíritu pueda obrar en vosotros, para que lleguéis a ser claros de espíritu y comprendáis Mi Palabra que os hablará a través de Mis mensajeros y que podéis leer en la Escritura, la que de Mí atestigua. Y reconoceréis entonces, que siempre es la misma Palabra que se os presenta, que encontraréis plena conformidad, que coinciden la palabra escrita y éstas que se os ofrecen directamente desde la altura, de que por eso Mi Palabra permanece siempre y eternamente la misma. Sólo que ella puede sufrir a través de los hombres otra interpretación, la que Yo siempre de nuevo rectificaré por Mi Palabra hablada desde arriba. Porque Yo quiero que andéis en la Verdad, que vuestra mente no sea dirigida en el engaño y que siempre Me reconozcáis a Mí Mismo en la Palabra mas lo que sólo puede ser el caso, si os afecta así como ha sido salida de Mí.

En Mi Palabra Yo Mismo os salgo al encuentro, de modo que tenéis que sentirme a Mí y Mi Presencia, es completamente igual, si oís Mi Palabra o si la recibís por la Escritura. Si Me sentís, entonces estáis en la Verdad, pues en la Palabra errónea no estoy Yo presente, y podéis notarme por otra parte sólo, si lleváis una conducta en amor, de lo contrario Mi Palabra se extingue en los oídos, si bien ella es la más pura Verdad, es decir que ella no está desfigurada por los hombres.

De modo que sólo el hombre amoroso puede dictar un juicio, porque sólo el hombre amoroso es de espíritu lúcido, y puede discernir la Verdad del error, porque este último le parece extraño y él lo percibe, de que no es la voz del Padre la que le resuena. Por eso todo debate que se plantee sobre la Verdad será sin éxito en los hombres, a quienes les falte el amor, mas llevará siempre a un resultado, donde Mis Mandamientos de amor sean respetados y se haga posible por medio de ellos el obrar del Espíritu. Estos harán comparaciones entre la Palabra escrita y la hablada y aceptarán lo que Mis mensajeros les han proporcionado directamente de Mí. Pues se hará indicación a la Palabra escrita como confirmación para que los hombres reconozcan la profunda Verdad y Mi obrar evidente los refuerce en su fe.

Una explicación e interpretación de Mi Palabra escrita conforme a la Verdad les será también mucho más comprensible y confirmarán la Divinidad de Mis Palabras, y cada hombre pensante se sentirá contento de Mi Palabra hablada desde lo alto y, sin embargo, no necesita rechazar la Escritura, porque coincide por completo con aquella.

Y mientras en vuestra enseñanza vayáis conforme con la Escritura, vosotros Mis servidores en la tierra, no temáis ningún debate espiritual, vosotros refutaréis cada objeción, vosotros interpretaréis y transmitiréis clara y lúcidamente el sentido de la Palabra escrita, pudiéndolo hacer compatible con la Palabra, ofrecida de arrida, tendréis éxito en cada hombre que busca, que está en el amor, y por eso tenéis que indicar siempre a los hombres, que el amor es lo primero y más necesario, para poder comprender Mi palabra y reconocerla como la Voz paternal. Porque únicamente el amor alumbra el espíritu y os hace receptivos para acoger Mi Palabra.

Amén

Traductor
Traducido por: Pilar Coors

La vita d’amore - L’Agire dello Spirito - La Sacra Scrittura

Affinché il Mio Spirito possa agire in voi, dovete vivere nell’amore, in modo che diventiate di spirito illuminato e comprendiate la Mia Parola che vi parlerà mediante i Miei messaggeri e che possiate leggere nella Scrittura che testimonia di Me. Ed allora riconoscerete che vi viene incontro sempre la stessa Parola, che trovate una totale coincidenza della Parola scritta e ciò che vi viene offerto direttamente dall’Alto, che la Mia Parola rimane sempre ed in eterno la stessa. Può soltanto subire un’altra interpretazione da parte degli uomini, che Io però correggerò sempre di nuovo attraverso la Mia Parola detta dall’Alto. Perché Io voglio che camminiate nella Verità, che il vostro pensare non venga guidato nell’errore e che nella Parola riconosciate sempre Me Stesso, che però può solo essere il caso quando vi tocca nel modo com’è proceduta da Me. Io Stesso vi vengo incontro nella Mia Parola, quindi dovete sentire Me e la Mia Presenza, non importa, se sentite la Mia Parola oppure l’accogliete tramite la Scrittura. Se Mi sentite, allora vi trovate nella Verità, perché nella parola errata non Sono Presente, e Mi potete nuovamente sentire soltanto quando conducete un modo di vivere nell’amore, altrimenti la Mia Parola risuona oltre alle orecchie, benché sia la più pura Verità, quindi non deformata dagli uomini. Quindi soltanto un uomo amorevole può emettere un giudizio, perché soltanto un uomo amorevole è di spirito illuminato e può distinguere la Verità dall’errore, perché quest’ultimo gli appare estraneo e sente che non è la Voce del Padre che gli suona incontro. Perciò ogni dibattito sulla Verità sarà senza successo con degli uomini che sono senza amore, come però condurrà sempre ad un risultato dove vengono osservati i Miei Comandamenti dell’amore e con ciò sarà reso possibile l’Agire dello Spirito. Costoro trarranno dei confronti con la Parola detta e scritta ed accetteranno ciò che viene trasmesso loro direttamente da Me tramite i Miei messaggeri. Perché si deve indicare la Parola scritta come conferma, affinché gli uomini riconoscano la profonda Verità ed il Mio evidente Agire rafforzi la loro fede. E fintanto che camminate conformi alla Scrittura nel vostro insegnamento, non avete da temere nessun dibattito spirituale voi, Miei servitori sulla Terra, potrete confutare ogni obiezione, darete chiaro e semplice il senso della Parola scritta e la potrete mettere in sintonia con ciò che viene offerto dall’Alto, avrete successo presso gli uomini che cercano, che stanno nell’amore e perciò dovrete sempre indicare agli uomini che l’amore è la prima e più necessaria cosa, per comprendere la Mia Parola e per poter riconoscerla come la Voce Paterna, perché solo l’amore rischiara lo spirito e vi rende ricettivi per la Mia Parola.

Amen

Traductor
Traducido por: Ingrid Wunderlich