• Volver

Relación primordial.... Estado de felicidad en el más allá....

Quien se conecta con la Deidad eterna radica también el profundo deseo del alma ser uno con Ella, y así se supera la separación entre el hijo terrenal y el Padre celestial, se hace más pequeño el abismo que los separaba, para finalmente dar paso al sentimiento seguro de la unificación y por lo tanto se restablece la relación primordial, y un estado indescriptiblemente hermoso es el destino del ser espiritual de ahora en adelante.... una armonía infinitamente dichosa que no es ni temporal ni espacialmente limitada, es decir, un estado permanente que todo lo abarca en el infinito. Eso probablemente requiere un tiempo infinitamente largo, pero una vez que se haya logrado este estado, todo lo que ha sucedido en la eternidad es solo un momento fugaz y los deleites de la eternidad superan mil veces todo sufrimiento en el estado no redimido.

Cuanto menos se preocupe el hombre por crear un vida exuberante en la tierra que sea satisfactoria en todos los aspectos, más fácil le parecerá la peregrinación a través del valle de la tierra, y así cuando deje la vida en la tierra.... si la ha recorrido obrando en el amor.... nada más que le recuerde el tiempo en la tierra, y ahora él solo mirará con compasión a las muchas almas errantes que carecen por completo del concepto del tiempo y que, por lo tanto, pueden languidecer todavía sin cesar en el más allá antes de que haya llegado el momento de la redención para ellos.

El tiempo puede transcurrir en los más atormentadores autorreproches en el más allá, pero también puede parecer al ser como un solo momento, y siempre es providencia divina, para que el ser del estado inconsciente pueda pasar a un mejor estado de espíritu más claro que se reconozca a sí mismo y al entorno.... Pero el ser mismo debe estar activo para que la hora de la redención le dé la justa libertad. Y así, el Padre que está en el cielo considera a Sus hijos de una manera que es beneficiosa para ellos....

Los seres espirituales a los que se les permite hacer saber al mundo tienen que adaptarse al lapso del tiempo de la existencia terrenal; tienen que adaptarse a las leyes terrenales y, en consecuencia, también tienen que tener en cuenta el alma humana, que en el estado espiritual actual solo tiene una comprensión muy limitada y, por lo tanto, primero tiene que ser instruido en detalle. Un alma imperfecta en el más allá muchas veces no sabe distinguir entre pasado, presente y futuro, pero el privilegio de las perfectas es que ya no existe para ellas ningún concepto del tiempo....

(interrupción)

Primal relationship.... state of happiness in the hereafter....

Anyone who unites with the eternal deity also harbours the deep desire to be one with It, and thus the separation between the earthly child and the father in heaven is overcome, the gulf which separated the two becomes smaller in order to finally give way to the secure feeling of unity and thus the original relationship is restored, and an indescribably beautiful state is now the spiritual being's lot.... an infinitely blissful harmony that is limited neither in time nor space, i.e. a permanent state that encompasses everything in infinity. This may take an infinitely long time, but once this state has been reached, everything that has passed is only a fleeting moment in eternity, and the delights of eternity outweigh all suffering in an unredeemed state a thousandfold. The less anxious a person is to create an opulent earthly life that satisfies him in every respect, the easier the pilgrimage through the earthly valley will seem to him, and so when he leaves earthly life.... if he has travelled it with love.... nothing will remind him of the time on earth, and he will only look with compassion at the many erring souls who completely lack the concept of time and who can therefore languish for endless times in the beyond before the moment of redemption has come for them. Time can pass in the most agonizing self-reproach in the beyond, but it can also appear to the being as a single moment, and it is always divine providence if the being is allowed to pass from the unconscious state into a better, clear spiritual state which regocnizes itself and its environment.... Yet the being itself has to be active so that the hour of redemption will give it the right freedom. And thus the father in heaven considers His children in a way that is favourable to them.... The spiritual beings, which are allowed to send information to the world, have to fit into the time span of earthly existence, they have to adjust themselves to earthly laws and therefore also have to take into account the human soul, which in the present spiritual state still has a narrowly limited understanding and therefore first has to be instructed in detail. An unfinished soul in the beyond often does not know how to distinguish between past, present and future, but the privilege of the perfected is that there is no longer any concept of time for them.... (interruption)