8772 Muerte prematura de niños

7 de marzo de 1964: Libro 92

Yo os abasteceré con Fuerza porque preciso de vuestra colaboración que, como condición previa, requiere vuestra libre voluntad... Por supuesto, Yo también podría elegir “recipientes” y designarlos para una actividad para Mí. Pero esto no correspondería a mi eterna Ley del Orden, porque únicamente la libre voluntad puede y debe ser decisiva - la que luego también da la garantía para que todo salga bien.

También hay seres humanos que están dispuestos a trabajar para Mí, pero frecuentemente carecen de las condiciones previas para que en la Tierra puedan cumplir con una operación de Redención... De modo que sé muy bien quién se somete voluntario a esta actividad y me sirve de recipiente adecuado. Y a tal recipiente también sabré mantenerlo y llevarlo a través de toda clase de apuros, sobre todo cuando el hombre ya no anhela el mundo sino pospone los intereses mundanos del todo - únicamente por la actividad espiritual a la que reconoce como sumamente importante.

Por eso será posible continuar con la actividad en la viña, y Yo siempre bendeciré vuestros esfuerzos; pues hace falta traer mucha instrucción a los hombres que son todo oídos... los que se ponen en contacto conmigo, poniéndome preguntas que Yo les respondo mediante mis siervos en la Tierra.

Cada vez de nuevo se os dice que en mi Reino hay muchos institutos de enseñanza, y que todo el universo contiene Creaciones que sirven para la maduración de lo espiritual que había caído en aquellos tiempos... Y cada Obra de Creación tiene su propio destino pues siempre servirá al desarrollo en ascenso de aquellos seres cuyas condiciones de vida corresponden a aquella Creación.

Por eso almas que han pasado por las creaciones terrenales pueden encarnarse en astros de otras constelaciones - eso por propensiones suyas que únicamente a Mí están conocidas... propensiones que garantizan una maduración en otros astros y que a aquellas almas aún pueden acarrear la encarnación como hombre en la Tierra, con lo que estas ya pueden ser encargadas de una misión...

Y esto también os explica la muerte de pequeños niños cuyas almas no habrían estado a la altura de un pasaje por la Tierra - los que, sin embargo, ya no pueden ser considerados como totalmente contrarios a Mí; de modo que les doy una otra ocasión para su perfeccionamiento en uno de los incontables institutos de enseñanza, que en general cumplen con su deber y proporcionan a los seres una cierta madurez...

Aunque así a estos seres no sea posible alcanzar la Filiación de Dios –la que les acarrea una vida terrenal aprobada– pero también en mi Reino espiritual pueden alcanzar la Bienaventuranza. Y una vez que ya hayan alcanzado un elevado grado de Luz, también podrán una vez volver a descender a la Tierra - para el fin de una misión, y entonces ganarse la Filiación de Dios.

A la encarnación de un alma como hombre están en juego una gran cantidad de circunstancias y propensiones, como también el grado de madurez al que ya había alcanzado en sus etapas de estado primitivo - un grado de madurez que ya no debe bajar tras una vida terrenal pero que puede bajar a causa de la debilidad del cuerpo cuando el alma se encarna en un cuerpo maternal no válido para su estado... de modo que entonces las dificultades de maduración son mayores, lo que puede resultar en un fracaso total...

Entonces Yo vuelvo a liberar el alma de su envoltura y la coloco allí donde un desarrollo en ascenso le está garantizado y le resulta más fácil, porque el alma ya no se encuentra en notoria oposición a Mí. De modo que hay muchas maneras de ayudar a lo que cierta vez había caído para que pueda regresar a Mí...

A pesar de que la Tierra es la Obra de Creación más ínfima y mísera, esta obtiene los supremos éxitos espirituales - si el ser está dispuesto a pasar por el camino terrestre. Consta que Yo veo de antemano si la libre voluntad u otras causas imposibilitan una maduración del alma, por lo que siempre intervendré ayudando donde el desamparo de un alma lo requiera... donde esta no puede arreglárselas ella sola con la suerte que le está impuesta, aunque con su voluntad no se me oponga...

Vosotros, los seres humanos, no podéis enjuiciar esto; y sin embargo, todo basa en mi Amor y mi Sabiduría. De modo que también ante la muerte prematura de niños debéis aceptar una argumentación por mi parte, porque nada sucede sin que tenga un sentido y un objetivo; pues todo es para el bien de lo espiritual que en otros tiempos se apartó de Mí y que debe regresar a Mí...

Yo tengo incontables posibilidades para que algún día logre mi Propósito... y también vendrá el día en que vosotros mismos sabréis y reconoceréis todo lo que me ocasiona a gobernar y a surtir efecto. Siempre estoy preocupado por lo que es débil, y le asistiré de toda forma posible. Pues también sé el grado de resistencia de un alma... sé hasta donde la resistencia ha cedido y si todavía seguirá cediendo; de modo que correspondientemente coloco el alma allí58 donde alcanza la meta lo más rápidamente.

7 de marzo de 1964

Consta que el paso por la Tierra es la única posibilidad para alcanzar la Filiación de Dios... Pero como Yo sé en qué medida un alma corre el riesgo de perder incluso el grado ya alcanzado, Yo evito esto, teniendo en cuenta su resistencia ante Mí ya muy reducida - una resistencia que tampoco puede interferir en la libre voluntad, y esta tampoco excluye una recaída.

Pero aún antes de su encarnación como hombre, el alma puede decidirse si quiere pasar por la ruta de la Tierra o no, y se lo será consentido según su voluntad... Así también se explica el destino posterior de los niños que tuvieron una muerte violenta... a los que también está dada la ocasión de continuar su camino de desarrollo en astros de otras constelaciones y de madurar en estos, aunque sea bajo otras condiciones...

Con el propósito de alcanzar la Filiación de Dios, cada alma puede volver a la Tierra como hombre, si ya se encuentra en cierto grado de Luz, si tan sólo lo quiere seriamente, y si voluntario acepta el cargo de una Misión con requisitos muy exigentes para tal alma.

Vosotros no podéis asimilar todo, de modo que nunca comprenderéis del todo el Efecto que surto ni mi Actividad. Pero Yo sé incontables caminos para ayudar a mis criaturas para que lleguen a las Alturas. Además, sé el transcurso y el final de cada vida terrenal. Aun así Yo mismo intervengo y realizo un cambio del transcurso maléfico únicamente cuando así puedo ayudar a un alma dispuesta, lo que únicamente Yo puedo saber.

El paso del ser humano por la Tierra es muy conflictivo, y hacen falta una gran fuerza y voluntad para recorrerlo con éxito espiritual. Al débil siempre le ayudo - si ya no me opone mucha resistencia... Pero la manera como mi Ayuda se manifiesta, eso es asunto de mi Amor y mi Sabiduría; pues siempre será mi intención el ayudar a mis criaturas a la maduración definitiva, y siempre me serviré de aquellos medios que me producen un éxito, porque Yo me desvivo por mis “niños”; y no permito que se deprave uno que ya aspira a Mí, dado que lo reconozco y surto el efecto correspondiente.

Amén.

Este comunicación se menciona en el siguiente folleto temático:

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