Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/8454
8454 Jesús enseñó el Amor en la Tierra
31 de marzo de 1963: Libro 89
El Alma de Jesús también trajo al Amor a la Tierra, por lo que Él era capaz de cargarse con un exceso de sufrimientos porque el Amor le dio la Fuerza para ello. Y Él sabía que a los hombres les faltaba precisamente el amor, y que por eso eran muy débiles. Aun así llevaron en ellos la Chispa de Amor... de modo que eran capaces de actuar en el amor, pero carecían de la disposición a amar porque mi adversario la sofocaba... pues este siempre estimulaba más bien el amor egoísta y evitaba que se manifestara el amor altruista.
Por eso Jesús vivía una Vida de Amor ante los hombres, una Vida ejemplar. A todos sus semejantes les hacía únicamente el bien, les curaba sus achaques, los consolaba y les ayudaba donde les hacía falta. Era altruista y siempre estaba dispuesto a aliviar a los seres humanos su suerte en la Tierra. Explicaba a los hombres por qué debían llevar una Vida en amor... Los prevenía contra las consecuencias de una vida terrenal insensible, pero también cada vez de nuevo les llamaba la atención sobre los resultados de una Vida llevada en amor, dando el ejemplo de sí mismo: que era capaz de prestaciones de una Fuerza extraordinaria, que curaba enfermos y que realizaba Milagros en virtud de su Amor que continuamente aumentaba en Él... Porque Él estaba en íntima Unión con Dios que es el eterno Amor mismo...
Y por eso Jesús enseñaba también a los hombres que realicen la unión con Dios –su Padre desde la eternidad– lo que, otra vez, sólo era posible mediante el amor y la oración íntima a Él... A los hombres todo esto les había quedado cosa ajena y solamente pocos llevaban una Vida de amor. Pero estos pronto reconocieron a Jesús como el Mesías prometido, pues reconocieron en Él el Padre.
Mediante el amor en ellos se había encendido una pequeña Luz, la que ahora estaba alimentada por la Enseñanza de Jesús; de modo que las tinieblas se apartaron de los hombres. Y esta Doctrina había que divulgarla entre los seres humanos, por lo que Él mismo enseñó a sus discípulos... a los que Él mandó al mundo con el encargo de hablar de Él mismo, de su Obra de Redención y del Evangelio del Amor, porque había que señalar a los hombres el camino correcto que lleva a la Vida que dura eternamente...
Jesús nunca habría sido capaz de llevar a cabo esta Obra de Redención si Él no hubiera estado colmado de Amor... pues simplemente como hombre habría sido imposible aguantar semejante escala de sufrimientos y tormentos que le tocaban sufrir... como le estaban impuestos... Pero el Amor es capaz de todo... para el Amor no hay límites... y no hay nada que para el Amor sería imposible, nada que el Amor no podría vencer... Pero la Fuerza del Amor le ayudó a ganar... en virtud del Amor Él ha soportado los sufrimientos más amargos y la Muerte más cruel en la cruz, y sólo rindió el Alma cuando la Obra estaba llevada a cabo...
Y sólo ahora al hombre resultaba posible el liberarse del adversario que le mantenía atado mientras la culpa del pecado original no estaba redimida... Sólo después de la Muerte de Jesús en la cruz los hombres podían invocar a Jesucristo por Fuerza y Fortalecimiento, en El que Dios mismo como eterno Amor se ha muerto para la humanidad.
Los hombres ya no están expuestos al adversario de Dios y su arbitrariedad, porque pueden separarse de él si ruegan a Jesús por ayuda; y mediante una Vida en el amor pueden lograr la fuerza necesaria para cumplir con la Voluntad de Dios. Por eso lo más importante en la vida terrenal es que a los seres humanos esté comunicado el Evangelio del Amor, lo que quita de los hombres las densas tinieblas, lo que les permite establecer una fe en Jesucristo como Hijo de Dios y Redentor del mundo, y que siempre regalará la fuerza necesaria para recorrer el valle de la Tierra con éxito.
El amor es fuerza, de modo que sin amor el hombre es débil y no puede lograr la finalidad por la que vive en la Tierra. Y sin Amor tampoco puede haber Luz en esta Tierra, porque se trata del reino del adversario de Dios... por eso el adversario dispersa tinieblas densas para que Dios no sea reconocido, porque de lo contrario el enemigo arriesgaría a perder su séquito que en la Luz sería reconocible como tal...
Por eso, donde se predica el Amor, allí también se podrá despertar la fe en Jesucristo - si los hombres tan sólo tienen la voluntad de cumplir con los Mandamientos de Amor. Por eso los colaboradores en la Viña del Señor deben estar muy activos y divulgar diligentemente la Palabra de Dios –que siempre contiene los divinos Mandamientos de Amor– porque los seres humanos deben estar al tanto que únicamente el amor les puede producir un progreso espiritual... que únicamente el amor les regala la fuerza para trabajar en sí mismos... y que el amor también regala la Luz e imparte a los hombres un amplio saber, de modo que ahora van su camino por la Tierra conscientemente - conscientes de su tarea y de la finalidad de su camino por la Tierra... una finalidad a la cual ahora también aspiran con todas sus fuerzas...
Tan pronto como reconocen a Jesucristo... como saben que Dios mismo en Jesús ha llevado a cabo la Obra de Redención, y ahora se entregan conscientemente a Él, también quedarán liberados de su culpa del pecado original, y lograrán su objetivo en la Tierra y la unión definitiva con su Dios y Padre desde la eternidad...
Amén.
Traducido por Ion Chincea