Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/8195
8195 Dios necesita a sus siervos y les promete protección....
20 de junio de 1962: Libro 86
Y vosotros, siervos Míos, tenéis siempre la seguridad de Mi cuidado, mientras Me ofrecéis vuestros servicios, mientras queráis estar activos para Mí. Quiero recordaros que aún queda mucho trabajo por hacer en la viña en el último tiempo antes del fin, y que este tiene que ser realizado voluntariamente por aquellos que quieran servirme.... Y mirad a la gente que os rodea.... ¿ dónde hay alguien, que conscientemente quiere estar activo para Mí y Mi reino?....
Mirad a la gente, qué mentalidad tiene.... Sólo en raras ocasiones alguien es tan leal a Mí que estaría dispuesto a servirme en Mi voluntad.... Y sólo en raras ocasiones una persona crea un vínculo tan íntimo Conmigo que puedo anunciarle Mo voluntad interiormente.... Así que rara vez puedo dirigirme a una persona y asignarle su tarea, que es sumamente importante en los tiempos finales en los que se encuentran vosotros los humanos.... Y por eso mantengo a los pocos servidores fieles y les encomiendo Mi voluntad, que luego siguen diligentemente y así existe la posibilidad de dirigirse también al corazón de otras personas.... Porque todavía hay buenas viñas humanas que sólo necesitan cuidados atentos para madurar todavía antes del final....
Y al final siempre se trata del libre albedrío del ser humano.... No puedo obligar a nadie y por eso sólo necesito vuestra libre devoción hacia Mí, que también apoyaré una y otra vez proporcionándoos fuerza a través de Mi discurso y no deseáis otra cosa que cumplir Mi voluntad.... Y Mi voluntad es y sigue siendo que Me abrís vuestros corazones, que me prestéis vuestro oído, para que pueda hablar a todas las personas a través de vosotros, porque este discurso sigue siendo sumamente importante, porque el tiempo está llegando a su fin.
Todavía existe la posibilidad aquí y allá de tocar un corazón humano que percibe Mi discurso directo como tal, y todavía quiere explotar esta posibilidad, para lo cual necesito vuestra voluntad, que no puedo ni quiero forzar, por el bien de vuestra perfección.... pero seréis ricamente bendecidos si sólo os dedicáis a Mí, si dirigís vuestros pensamientos hacia Mí y Me dejáis daros regalos tan a menudo como sea posible.... Recibiréis fuerza espiritual y terrenal y podéis sentirme cada vez más cerca de vosotros, porque cuanto más profundamente os entregáis a Mí, más os tengo cautivo.... Y no debéis temer nada, sea lo que sea.... Yo sé de esto y todo tiene su justificación espiritual y su propósito.
Pero también estáis constantemente bajo Mi protección porque os necesito y no quiero prescindir de vuestros servicios para Mí. Sólo tened en cuenta que necesito el libre albedrío del ser humano y éste rara vez Me es dado de tal manera que pueda usar al ser humano como receptáculo para Mi Espíritu.... Sin embargo, salvo a través de Mi Espíritu, no puedo dar a conocer Mi voluntad a los humanos, y por eso debéis permanecer fieles a Mí, que ya Me habéis dado vuestra voluntad, la que necesito una y otra vez, porque la gente necesita constantemente Mi discurso y quiero ayudarla en el último tiempo antes del fin.... Y también será de bendición para vosotros, porque recibiréis fuerza y luz y gracia en abundancia....
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise