Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/8132
8132 “Venid a Mí....” Consuelo en tiempos de necesidad....
22 de marzo de 1962: Libro 86
Todos los que estáis trabajados y cargados seréis consolados, si solo venís a Mí y Me invocáis en vuestra angustia. Quiero demostrarme ante vosotros como un Padre amoroso y daros fuerza tanto corporal como espiritual, porque todos vosotros sois todavía unos pequeños niños débiles que necesitan ayuda, por lo que os llamo a Mí con amor compasivo. Verdaderamente solo estoy preocupado por vuestra felicidad, que sólo podéis encontrar en unión Conmigo, y por eso os digo: “Venid a Mí....” Porque sólo Yo puedo ayudaros a la felicidad, sólo Yo puedo llenaros con fuerza, para vivir según Mi voluntad.... Sólo Yo puedo irradiaros con Mi fuerza de amor, que os hará felices y os ayudará a alcanzar la perfección.
Por tanto, venid a Mí, que estáis trabajados y cargados, Yo quiero refrescaros. Porque puedo dirigirme a vosotros, y Mi Palabra os transmitirá verdaderamente fuerza; ;i palabra os dará paz, porque entonces estáis seguros de que Yo Mismo estoy cerca de vosotros cuando Me dirijo a vosotros. Entonces ¿por qué sois tímidos y temerosos cuando tenéis la certeza que estoy presente para vosotros? Y, sin embargo, poseéis pruebas de Mi presencia si se os permite escuchar Mi Palabra una y otra vez, que os introduce en toda la verdad....
Es cierto que el mundo se alabanza sobre vosotros y os infunda temor y desaliento, pero estáis bajo Mi protección y no tenéis que por qué temer ninguna desgracia, mientras Me dejéis estar presente en vosotros.... mientras vosotros voluntariamente Me queráis servirme como recipiente en el cual pueda derramar Mi Espíritu. Es una misión tan importante la que tenéis que cumplir, que verdaderamente os daré todas las protecciones y que os daré la fuerza para protegeros de todo lo que pudiera impediros cumplir esta misión.... Yo Mismo estoy detrás de vosotros, y por lo tanto Yo Mismo soy el mejor luchador para vosotros.... solo quiero que establezcáis un vínculo cada vez más fuerte Conmigo, para que pueda estar presente para vosotros en cualquier momento, que dirijáis vuestro pensamientos a Mí a diario y a cada hora.... Pues esto es necesario para la tarea a la que voluntariamente os habéis ofrecido a cumplir....
El tiempo está llegando a su fin y no debe haber ralentí, no debéis cansaros y quedaros inactivos.... debéis servirme con todo celo y con toda disposición porque solo este trabajo voluntario es de bendición.... tanto para vosotros mismos como para vuestros semejantes, que necesitan fuerza o que deben encontrar el camino hacia Mí, a los que quiero dirigirme a través de vosotros. Y es por eso que Yo Mismo os empujo una y otra vez a una actividad en Mi viña. Pero Mi oponente también trata de intervenir e impediros al respecto, y siempre estaréis sometidos a perturbaciones, una y otra vez seréis turbados, y entonces solo debéis huir a Mí, Quien os apoya en cualquier necesidad del cuerpo del alma.
Los últimos tiempos no son un tiempo de descanso.... habrá una lucha constante con el adversario porque siempre encuentra la manera de confundiros.... Pero siempre también podéis resistirlo porque solo necesitáis venir a Mí, Que de verdad siempre os “refrescará y reanimará”, como os he prometido.... Por tanto, guardad siempre Mi promesa, porque no Me haréis ningún llamado en vano que se levante hacia Mí en espíritu y en verdad.... Porque mientras Me dejéis dirigirme a vosotros, recibiréis fuerza directamente de Mí, y también abriréis vuestro corazón a Mi irradiación de amor, y entonces el adversario tendrá que alejarse de vosotros porque huirá del rayo de luz del amor.
“Pedid y se os dará.... llamad, y se os abrirá....”, Pensáis demasiado poco en esta Mi promeso, de lo contrario nunca tendríais que temer ni preocuparos, porque Yo Me ocupare de todo lo que os preocupa, los que Mi servís y os daré fuerza constantemente. Entregaos a Mí y dejadme hacer lo Mío, entonces pertenecéis a los Míos, a quienes Yo no abandonaré en su necesidad, a quienes ayudaré terrenal y espiritualmente, como lo he prometido....
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise