Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/8125
8125 El conocimiento de la naturaleza de Dios es necesario...
14 de marzo de 1962: Libro 86
Grande es el poder de Aquel, Que os creó... Su amor es infinito y Su sabiduría insuperable... Siempre recordaos de eso para que vosotros mismos os pongáis en contacto con Él, para que siempre enviéis vuestros pensamientos a Mí, Que anhelo vuestro regreso y verdaderamente dejo que gobierne Mi poder, amor y sabiduría para facilitaros este regreso a Mí.
Si vosotros humanos os imagináis a vuestro Dios y Creador como un ser sumamente perfecto, si podéis creer con convicción que ese Ser sumamente perfecto quiere ser vuestro Padre, entonces también abandonaréis vuestra resistencia interior, que os mantuvo separados de Mí por un tiempo interminablemente largo... Intentaréis de establecer la relación correcta Conmigo, la relación de un hijo con el padre... y como pequeños niños débiles pediréis Mi protección y ayuda cuando estéis en apuros... pero vosotros también sentiréis amor por Mí, acudiréis confiados a vuestro Padre y por eso también os entregaréis a Mí, y entonces tampoco querréis dejarme porque Yo Mismo ahora os sostengo, porque Mi lazo de amor os enreda que vosotros tampoco soltaréis jamás. Pero esto requiere el conocimiento de Mi Ser sumamente perfecto...
Debéis aprender a amarme y por eso debéis saber de antemano que Yo Mismo soy el Amor; no debéis temerme como un Dios castigador, sino amarme como a un Padre leal y cariñoso... Sólo entonces entraréis en la relación correcta Conmigo, os entregaréis voluntariamente a Mí y habréis completado el regreso, que es el propósito y el objetivo de vuestra vida terrenal... Y es por eso que trato de demostraros Mi poder, Mi amor y Mi sabiduría... Si os metéis en problemas, siempre os sacaré de nuevo de estos, porque para Mí no hay nada que Me sea imposible de lograr... Y también os envió constantemente pruebas de Mi amor dándoos también alegrías que siempre debéis considerar como un don Mío...
Siempre podéis saber que estáis a salvos en Mi cuidado, porque reconozco verdaderamente lo que necesitáis espiritual y físicamente, y eso también os lo concedo, en cuanto os habéis rendido a Mí, en cuanto establecéis la conexión Conmigo a través de pensamientos íntimos, a través de la oración y obras del amor... Y entonces podréis experimentar constantemente la prueba de Mi amor, sabiduría y poder, porque sólo a través de esto puedo conquistar vuestro amor, porque quiero despertar en vosotros el deseo de la unión Conmigo y entonces también se cumplirá vuestro propósito de la vida terrenal, en cuanto establezcáis la íntima unión Conmigo... en cuanto os entreguéis al Padre como hijos y os absorbáis completamente en Su voluntad. Entonces vosotros tampoco andaréis más en tinieblas espirituales, seréis irradiados por Mi Mismo con Mi luz de amor, en la unión íntima podré hablar a vosotros, y vuestro amor se encenderá cada vez más, y ya no habrá más tinieblas en vuestros corazones.
En cuanto Me reconozcáis como un Dios de amor, de sabiduría y de poder, también os esforzáis por Mí, y esto significa que Me reconoceréis a Mí, a Quien una vez os negasteis a reconocer... Y por eso no dejaré nada sin probar durante vuestra vida terrenal para daros el esclarecimiento correcto sobre Mi naturaleza... Porque mientras no Me reconozcáis por lo que soy: como un ser sumamente perfecto que os ama y que quiere conquistar vuestro amor... mientras que no veáis en Mí a vuestro Padre, Que quiere hacer felices a Sus hijos para siempre... por tanto tiempo todavía os mantengáis alejados de Mí... y por eso Me revelo a vosotros en Mi amor, sabiduría y poder... y constantemente cortejo por vuestro amor... Pero también lo ganaré un día, y entonces permaneceréis Conmigo para siempre...
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise