Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7908
7908 La época final da razón a los regalos de gracia....
3 de junio de 1961: Libro 82
Es un acto de gracia no merecido si los hombres pueden escuchar las palabras desde lo alto, porque durante la época aproximada al final la humanidad ha llegado al nivel espiritual más bajo, lo cual determina la disolución de la creación mundial, una transformación y reformación de todo lo espiritual que todavía se encuentra en un estado atado, y también lo espiritual que anda como hombre sobre la tierra y que ha fracasado por gran parte en su prueba vital terrestre. Entonces los hombres no buscan por sí mismos la unión conmigo, se mantienen alejados de Mi y no son dignos en su rechazo de que les hable.... Y por esto es una gracia extremadamente excepcional que a pesar Me inclino para hablar con los hombres, que les paso a aquellos a Mi palabra que se mantienen lejos de Mi. Me olvido (Paso) del estado de su indignidad, Yo Me acerco a ellos que se desvían de Mi, justamente porque ha llegado la época final y porque este final significa para muchas almas humanas una nueva atadura en una funda y la cual quiero evitar todavía mientras quede tiempo.... Los llamo y tento, dejo entrar en cualquier sitio un rayo de Mi luz, toco a los hombres con este rayo para conseguir que reflexionen sobre aceptar a Mi palabra en sus corazones, a moverla en el corazón y para cambiar después a su estilo de vida.... Solo quiero que no se pierdan para tiempos eternos.... Porque existe este gran peligro, porque solo poca gente mantienen una creencia viva en Mi, que les protege ante la perdición en cuanto llegue la hora del final. Y por esto Mi amor se acerca a vosotros con el último regalo, aunque no os lo merecéis.... Solo hace falta no oponeros si mis servidores os quieren transmitir Mi palabra.... Escuchadlos sin resistencia interna lo que Yo os ofrezco.... Podéis ganar una creencia en vuestro Dios y creador que no sea una creencia ciega.... Y pronto vais a sentir a Mi amor hacia vosotros, porque vais a reflexionar pensamientos que no podéis rechazar, porque estáis sintiendo que son la verdad. Solo hay que dejar atrás vuestro rechazo interno y estáis salvados para todos los tiempos y eternidades. Escuchadme.... y la fuerza de Mi palabra tiene efecto en vosotros, porque es la fuerza del amor divino que transmite Mi palabra para vosotros.... No son palabras humanas vacías que estáis escuchando cuando Mis mensajeros os transmiten a Mi regalo de gracia.... Porque las palabras humanas son fáciles de deshacer, pero las palabras divinas tienen una influencia, suponiendo que la voluntad del hombre no se opone contra esta influencia. Por esto no os pido nada mas que me estáis escuchando en cuanto Yo me acerco a través de la palabra que os traen Mis mensajeros.... No os pido nada mas que no rechazarme, sino reflexionar sobre todo solo una vez.... Y de verdad, os voy a ayudar a reconocer la verdad de Mi palabra, vuestro corazón se sentirá tocado y vuestro pensamiento se acercara a Mi lentamente, vuestra resistencia se disminuye y la fuerza de Mi palabra comienza a dar efecto en vosotros. Solo hay que dejar a tras vuestra resistencia y de verdad, Yo Mismo cuidaré a cada uno de vosotros dándole palabras de amor y gracia, palabras de consuelo y apoyo, dándole palabras de sabiduría como hace falta para su alma a que ello mismo Me reconozca por sí solos en las palabras, las cuales traerán Mis mensajeros. De verdad os digo: Ha llegado la etapa final.... Y Mi amor y misericordia se acerca una y otra vez de nuevo para protegeros del destino de la atadura nueva en cuanto llegue el final.... Y por esto derramo a Mi regalo de gracia con abundancia, y cuyo corazón no está completamente endurecido, intento ganar para Mi y Mi reino.... Intento que me descubra como un padre y Dios cariñoso de la eternidad, y va a ser tocado por el rayo de Mi amor. Va a descubrir a Mi palabra como la voz del padre, como Aquel que quiere ayudar a Su hijo. Aquel que le quiere salvar ante el barranco, que le quiere salvar todavía antes de que llegue el final....
amén
Traducido por Bea Gato