Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7719
7719 La luz de la eternidad....
3 de octubre de 1960: Libro 81
En Mí reconocen la luz que brilla desde la eternidad, que se irradia hacia el infinito y que también quiere penetrar en los corazones de ustedes para que haya claridad y desaparezca toda oscuridad. Yo, por tanto, Soy la luz de la eternidad Que descendió a la tierra que estaba envuelta en la oscuridad y, por tanto, era una morada infeliz para ustedes, los humanos. Yo mismo bajé a la tierra y encendí una luz en la gente.... Les llevé la enseñanza divina del amor, cuya observancia ciertamente les impartió discernimiento.... Y discernimiento es la luz, discernimiento es el conocimiento de la verdad pura que emana de Mí.... Le mostré a la gente el camino para llegar a la luz.... Les mostré el camino del amor, que irrefutablemente tenía que hacer ganar sabiduría a la gente, pues el fuego del amor irradia la luz de la sabiduría. La "luz" descendió a la tierra, por lo que el "amor" ha llegado a la tierra.... y el amor soy Yo mismo, Yo mismo soy la fuente original de la luz.... Y como tal ustedes deben aprender a reconocerme, deben saber que Mi ser es "amor" y por lo tanto debe ser también "sabiduría" ilimitada y que.... quien es iluminado por Mi amor también es guiado hacia la sabiduría más profunda y así se encuentra en discernimiento. Por lo tanto, ningún ser humano puede llegar a ser conocedor, es decir, llegar al discernimiento, si primero no se ha encendido el amor, porque sin amor no hay sabiduría, al igual que no puede haber luz sin fuego. Y si ustedes, los humanos, quieren madurar en discernimiento, primero tienen que esforzarse por madurar en el amor, es decir, dejar que su grado de amor se eleve cada vez más, porque entonces la luz estará dentro de ustedes e iluminará brillantemente todo lo que antes estaba todavía oscuro. Y sólo debes pedir fuerza en la oración, debes pedir el fortalecimiento de tu voluntad, y esta petición te será verdaderamente concedida. Porque a través de la oración sincera a Mí se conectan con la fuente de la fuerza, con la fuente de la luz y del amor.... se conectan con Aquel que puede y quiere darles todo, pero que quiere ser abordado por ustedes mismos para ello, porque entonces Su obrar será ilimitado si la voluntad de ustedes le pertenece.... Vengo a ti y verdaderamente enciendo la luz de la iluminación en ti, verdaderamente no te dejo en la oscuridad espiritual, porque te imparto fuerza que luego usas para la actividad amorosa y entonces la luz en ti también se enciende y ganas discernimiento. Y así llegarás a entender que tu intelecto no puede darte el conocimiento que corresponde a la verdad o que no puedes llamar al conocimiento "discernimiento", porque el discernimiento es la sabiduría y la sabiduría es el conocimiento de Mí que doy luz y felicidad. Y sólo esto es lo que debes procurar, porque este conocimiento es llevado a la eternidad, porque no se desvanecerá como el conocimiento terrenal, porque constituye para los seres humanos la riqueza con la que el alma podrá trabajar un día en el reino del más allá. Debes desear la luz de Mí, debes dirigirte a la Luz Misma para que te ilumine; debes orar por ella y la recibirás, pues a través de la oración ya estableces la conexión con la Luz Eterna y Ella enviará Sus rayos a tu corazón y te dará según tu deseo. Luz, Amor, Verdad.... todo Me pertenece, todo pertenece a Mi Ser, y no se puede pensar en uno sin el otro.... pero tan pronto como te hallas en el conocimiento, tan pronto como llamas tuyo a un conocimiento verdadero, se rompe la oscuridad de la noche en la que estuviste por tiempos interminables.... habrás tomado el camino de vuelta a Mí, te estás moviendo hacia la luz de nuevo, te dejas iluminar por Mí como la "Luz Eterna", y volverás a remodelar tu ser en el ser original.... ustedes se convertirán en lo que eran al principio.... seres llenos de luz, que están constantemente conectados con la Fuente original de luz y poder.... serán bendecidos y así permanecerán para siempre....
Amén
Traducido por J. Gründinger