Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7405
7405 Anuncio de una estrella....
5 de septiembre de 1959: Libro 78
Lo que os se os da a través del espíritu lo podéis aceptar sin dudarlo.... y así también debéis experimentar que el fin cercano de la tierra ya se está haciendo sentir en el universo, que se están produciendo cambios cósmicos, porque es la voluntad de Dios, que al final de un periodo terrestre se vuelven perceptibles signos en todos los sentidos, que el hombre no podría explicarse de manera natural a sí mismo, que deben probarle el poder de un Creador y que, por lo tanto, señalan muy claramente a ese Creador.
Y estos cambios cósmicos se refieren principalmente a desviaciones del curso anterior de las estrellas, que toman un camino diferente y tales procesos son y siguen siendo inexplicables para los hombres y, sin embargo, no se pueden negar. Cuanto más se acerque el final, con más frecuencia los hombres notarán tales procesos, al principio poco reconocibles, pero luego se vuelven más y más evidentes, para que la gente pueda decir verdaderamente: “las fuerzas del cielo se mueven....”
Y ninguna voluntad humana tendrá que ver algo con eso, sólo se expresará la voluntad de Dios, y por eso todos los hombres también podrían creer en Dios si quisieran seguir atentamente tales fenómenos insólitos. Pero quien no está dispuesto a creer, tampoco podrá ser convencido de la existencia de un Dios y Creador a Quien todos los elementos de la naturaleza tienen que obedecer.... Pero quien presta atención en eso también sabe qué tiempo ha sonado....
Y así una estrella se desviará de su órbita habitual y se dirigirá hacia la tierra. Y esta estrella sigue su camino independientemente de la voluntad de los humanos, y representa un gran peligro para ellos, pero su curso no será detenido porque la tierra tenga que soportar un temblor, en detrimento y para el bien de los humanos en ella.... Porque muchos humanos perderán la vida como lo fue proclamado tiempos atrás.... Y la tierra sufrirá un empujón....
Nadie podrá imaginarse la peligrosa situación en la que se encontrará todo el planeta. Pero esta catástrofe natural no conducirá a la destrucción total, pero será de una magnitud inimaginable que para innumerables humanos ya será el final. Pero cualquiera que sobreviva pronto estará acercándose al último final.... a un acto de destrucción provocado por la voluntad humana, que probablemente sea el permiso de Dios pero no Su voluntad.... mientras que la primera catástrofe cósmica todavía tiene un propósito redentor para que se les dará todavía a los incrédulos un último indicio de un Poder, Que lo dirige todo y que nada sucede arbitrariamente.
Todavía se les debe dar un medio de salvación, un último medio para llegar a la fe, para que no se pierdan. A través de este acontecimiento, Dios Mismo habla a los humanos que no prestan atención a Su voz baja, pero su voz fuerte a menudo suena dolorosamente, y muchos también sucumbieran a ella, es decir, muchos morirán, pero para quienes aún queda la posibilidad de recuperar en el reino del más allá lo que descuidaron en la tierra.
Pero también muchos tendrán todavía la gracia de experimentar el último breve tiempo hasta el final, y ahora es decisiva nuevamente la voluntad de creer porque los incrédulos no sacan ningún beneficio para sus almas de lo experimentado.... Y a ellos el final solo les traerá la suerte de un destierro repetido a la materia, de lo cual Dios en Su amor misericordioso quiere proteger a los hombres. Y es por eso que Él amonesta y advierte de antemano y llama la atención de los hombres sobres todos los fenómenos en el último tiempo.... y bienaventurado el que presta atención, quien cree en esto y vive su vida en consecuencia en la tierra.... será guiado a través de todo lo difícil, y cualquier cosa que le sobrevenga, es bueno para su alma y para su maduración en esta tierra....
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise