Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7167
7167 La explicación de la finalización de una época terrestre
17 de julio de 1958: Libro 76
Tomad conocimiento que el tiempo se termina que se ha dado al hombre para su desarrollo en esta tierra. Toda la raza humana que tuvo la oportunidad de encarnarse en esta época terrestre ha aprobado más o menos la prueba, han entrado al reino del más allá y han podido seguir en su proceso del desarrollo hacia lo alto.... aunque bajo otras condiciones que en la tierra.... pero también había un número incontable de gente que se ha caído de nuevo en la profundidad.... y ahora los últimos de esta generación fueron concedidos para incorporarse como hombres.... también con la meta de liberarse de su forma material durante la vida terrestre, la cual les tiene ya atado desde eternidades. Pero ahora este tiempo llega a su final y sin remedio habrá un final, porque tiene que comenzar una nueva época de salvación.... Y se entiende que en la época final solo se consigue un éxito débil, porque hay mucha encarnación espiritual que va contra Dios y que no va a entrar justamente por su resistencia.... pero está determinado para pasar por la tierra como hombre antes de que comience una nueva época de salvación.... Para poder dar a estos hombres una oportunidad de pasar con éxito su camino en tierra,se les da muchos espíritus como acompañantes, que les prestan apoyo donde el hombre tiene poca fuerza.... Sí que es posible que también estos hombres lleguen a la madurez necesaria, pero es extremadamente difícil, porque no se puede influir a la voluntad de forma forzada.
Pero el final de esta época terrestre está determinado desde la eternidad, está estipulado en el plan de salvación, porque Él lo sabe desde siempre cuando ha llegado el tiempo de constituir una nueva orden en la tierra, la cual fue derrumbada por la voluntad del hombre y por esto se hizo imposible un avance del desarrollo espiritual....
Si ahora los hombres creen que no es complatible con el amor de un “Dios y padre” que un acto de creación, como la de la tierra, va en contra de una transformación total, se tiene que argumentar en contra, porque sería mucho más una falta de amor si no se terminara aquel nivel espiritual más bajo, porque la tierra hubiera terminado de ser una estación de desarrollo de lo espiritual, fallaría en su reto por completo y solo daría espacio para el chaos para lo espiritual que reina.... El amor de Dios intenta de todo para ayudar en la salvación del hombre, pero no se ve ninguna mejora, no se espera ningún “giro” en esta tierra, porque no se cuenta ya que la raza humana cambie y vuelva a la orden divina.... solo esto podría frenar un “final”.... Y Dios lo sabe desde la eternidad que ya no existe esta posibilidad, y por esto Él pudo montar Su plan encima de la voluntad del hombre.... Y Él lo va a realizar, porque Él es un Dios bueno, justo y sobre todo divino, que no quiere otra cosa que ayudar a sacar a Sus criaturas de la profundidad y ayudarles a alzarse hacia arriba y Él sabe los remedios adecuados para aplicar.... Pero los hombres no quieren creer que el tiempo ha llegado, que la humanidad ya ha llegado al punto espiritual más bajo que ya no permite un plazo más alargado.
No queréis realizarlo, aunque el sentido interno os lo dice que la humanidad no puede esperar otra cosa. Y por esto poneis un reparo tras otro sin lógica ninguna.... Porque si estáis pensando seriamente lo que es esta tierra y para qué debe servir.... y si estáis viendo que un hombre pocas veces valora su vida terrestre para seguir desarrollando su espíritu, entonces tiene que ser probable que venga un final y que no puede existir de la misma forma.... También os debe ser claro que Dios no puede forzar a los hombres a llegar a una madurez, así sólo una transformación puede ser la consecuencia, una finalización de una época sin efecto y un comienzo de una nueva, donde un desarrollo con ascenso de lo espiritual puede seguir adelante y donde el espiritual caído a la profundidad tiene la posibilidad de un alce.... Los hombres deberían considerar siempre el amor eterno y la sabiduría inmejorable de vuestro Dios, Aquel que quiere ser el padre de todos y que quiere hacer verdaderamente de todo para conseguir Su reto. Y así podéis contemplar el final aproximado de la tierra como un acto de amor, nunca como una crueldad, porque Él no es capaz de eso, Él nunca quiere destruir, sino sólo regalar vida a aquellos que lo han perdido por culpa propia.
amén
Traducido por Bea Gato