Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6720
6720 La miseria como remedio de salvación....
23 de diciembre de 1956: Libro 72
Los hombres tienen que pasar todavía a través de una miseria muy grande los que estáis completamente sometidos al mundo y los que no han encontrado todavía el camino hacia Mi. Intento ofrecer la salvación a todos, a todos echo el ancla de salvación, pero si lo agarran es vuestra elección, porque no os quiero forzar. Pero la penuria espiritual pide pasar esta penuria terrestre.... Porque no sabéis lo que significa si vivís el final en esta miseria.... Solo estáis viendo el mundo, y estais anhelando por los bienes y no lo notáis que vuestros pies están tocando el borde del abismo.... Y si Yo os quiero retraer, tiene que venir una penuria sobre vosotros que os empuja a mirar a vuestro alrededor.... Y si retrocedeis, si estáis viendo el abismo y huis, entonces la miseria ha contraído mucha bendición para vosotros. Y en poco tiempo los hombres están perdiendo todo lo que tenéis de bienes espirituales, porque estáis delante de un cambio enorme, ante un cambio espiritual que incluye la destrucción de creaciones terrestres. Pero podéis acumular en poco tiempo un tesoro muy grande de bienes espirituales que son inmortales. Y los hombres pueden conseguirlos a través de penas y sufrimiento que hacen morir los anhelos por bienes terrestres.... Yo mismo quiero entrar en el círculo de vuestros pensamientos, quiero que me estáis recordando, los que me han olvidado.... Quiero que me buscáis durante la miseria grandísima, Al que no estáis creyendo.... que Yo, vuestro Dios y creador Me estáis recordando como última salvación, si no conocéis ninguna salida. Yo os facilita todo mucho más para poder creer en Mí por remedios de ayuda inusuales, que ya no podéis dar como una casualidad.... Pero Yo solo puedo ofrecer aquellos remedios de ayuda que no os fuerzan. El sufrimiento es inevitable y se os acercan de diferentes maneras, pero solo tienen un propósito, dejaros acercar a Mí. Si os hablo, si os mando mensajeros que os traen a Mis palabras, si pronuncio el evangelio por el mundo y os aviso de un final.... todo aquello no sirve para conseguir a un cambio de la mente de aquellos hombres que están sometidos al mundo, que están tan encerrados en su rutina que solo las ganancias de sus bienes les parecen deseables. Y tienen que desviarse del mundo por miseria sensible si quieren encontrar salvación antes del hundimiento. A toda la humanidad mundial aquellas palabras no son entendibles, porque no saben que sus almas están en peligro, que se encuentran en un estado terrible porque el Señor de este mundo los tienen bajo su control y no pueden liberarse mientras el hombre se pega más con el mundo y no se suelta del mundo. Y por esto no entienden que la pena sirve como remedio de salvación para sus almas, pero se les puede quitar las ganas del mundo y sus bienes por defectos corporales, enfermedades o por otra penuria no se puede aprovechar, y entonces a lo mejor sus pensamientos pueden dirigirse por otras direcciones. Mientras el mundo tiende con sus gozos y alegrías no se oponen con resistencia y el último tiempo se pasa sin aprovechar para la eternidad. Pero la gran pena puede tocar los corazones, la gran miseria puede abrir los ojos de algunas personas y dejar reconocer la ranciedad del mundo y sus bienes. Y benditos son los que dejan tocar sus corazones por penuria.... benditos son quien practica renuncia a favor de semejantes en situaciones difíciles.... Porque aquel cambia de rumbo del trayecto que está pasando y el peligro de la caída está proscrito.... y va a bendecir la penuria que le salvó de la muerte....
amén
Traducido por Bea Gato