Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6230
6230 El fin - Modificaciones y nueva Creación
6 de abril de 1955: Libro 67
Sucederá como os lo he anunciado: la Tierra perderá su aspecto actual y tendrá lugar un recogimiento espiritual y material. Se separarán las ovejas de los lobos. Los Míos entrarán en la bienaventuranza pero los que pertenecen a mi adversario serán condenados a un nuevo cautiverio. Así ha de ser, pues de otro modo no se podría progresar hacia lo Alto, porque todo lo espiritual, salvo aquellos pocos hombres que me permanezcan fieles hasta el final, continuaría descendiendo. Pero la Tierra debe seguir conservando su finalidad; si ha de servir al Espíritu, debe llegar a lo Alto.
Y los hombres actuales que ya han recorrido el camino a lo largo de la Creación, han recorrido este camino previo en vano. Quienes, a través de la evolución, han logrado llegar al último peldaño del camino previo en la Tierra, fallan ahora en la última etapa, y caerán tan bajo que les será impedida la entrada en el Reino espiritual y quedarán apresados en la más dura materia.
Es muy pequeño el número quienes utilizaron su vida terrenal de manera realmente correcta para perfeccionarse. Porque mi adversario ha envenenado toda la humanidad; la Tierra debe ser limpiada antes de que pueda cumplir su verdadera tarea. Realizaré esta purificación mediante una poderosa obra de cambio a la que el género humano no podrá escapar porque ellos mismos la han causado con su conducta y su idiosincrasia totalmente opuestas a Mí. Tiene que hacerse un cambio por el bien de mis criaturas, que sufrirían durante un tiempo sin fin si no terminaran su evolución en la Tierra de acuerdo con mi Voluntad.
Y el momento ha llegado, aunque a vosotros, hombres, os parezca increíble que algo así, de lo que no se encuentran ejemplos parecidos en la Tierra, pueda realizarse en la Creación, en la naturaleza. La Tierra en su forma actual se encuentra en el último tiempo de su existencia. Vosotros no podéis comprender qué es lo que significa que todo deje de existir, que los hombres, los animales y todas las obras de la Creación acaben y aparezca integralmente una Tierra nueva. Ni el más avanzado de vuestros pensamientos lo puede imaginar porque ante vosotros, como milagro tras milagro, los cuales contemplaréis, surgirán obras de Creación totalmente nuevas que nunca habéis visto y vivificarán la Tierra Nueva. Desde el principio de todos los tiempos he anunciado a la humanidad que será creada una nueva Tierra y un nuevo Cielo, pero la gente no ha entendido lo que esto significa.
Pero mi Palabra es Verdad y será cumplida. Será una prueba de mi Divinidad sólo para unos pocos, para los que han venido a Mí, los Míos, con una fe profunda; a estos Yo puedo abrirles el Paraíso de la Tierra Nueva. Porque son y seguirán siendo mis hijos para siempre. Esos pocos comprenden el significado de mi Palabra y esperarán con fe firme mi Venida, y Yo los rescataré de la miseria que habrán de padecer los últimos días. Porque ellos son mis hijos, a los cuales Yo buscaré cuando el tiempo se cumpla.
Amén.
Traducido por Meinhard Füssel