Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/5793
5793 Difundir la enseñanza del amor divino es necesario...
19 de octubre de 1953: Libro 63
A todos vosotros doy Mi Palabra, a todos vosotros transmito el Evangelio con toda pureza, y todos vosotros podéis recibirlo a través de Mis discípulos, a los que envió de nuevo con el fin de difundirlo entre la gente... Vosotros debéis saber de Mi enseñanza de amor, de Mi obra de redención, debéis saber lo que debéis hacer para ser felices; debéis ser instruidos de qué clase de trabajo del alma que debéis llevar a cabo en vosotros mismos, y se os debe informar de que manera tiene un efecto una buena y una mala forma de vida terrenal después da la vida de vuestro cuerpo...
Os estoy transmitiendo el Evangelio a todos vosotros a través de Mis mensajeros... Y podéis experimentar por vosotros mismos que es pura verdad, en cuanto cumpláis mis mandamientos de amor, en cuanto no sólo seáis oidores sin también hacedores de Mi Palabra. Entonces todas Mis Palabras se confirmarán, entonces Mis promesas se cumplirán, a las que siempre se adjuntan ciertas condiciones, que por tanto debéis conocer... Yo Mismo tengo que hablaros, vosotros tenéis que saber de Mi voluntad por Mí Mismo, porque de lo contrario no os dejaréis impresionar, aunque se os anime del lado humano a cambiar vuestro modo de vida.
El poder de Mi Palabra debe tener un efecto en vosotros, debéis ser estimulados a amar, a ser activos según Mi voluntad... y por eso os envío Mis mensajeros que os deberán hablaros en Mi nombre y que por lo tanto os pueden hablar vivamente, porque ellos fueron introducidos a la vida por Mí Mismo y porque también tienen algo propio que os deben dar... la pura verdad, tal como emanó de Mí...
Llevaros esta verdad es su misión, su oficio, para el cual Yo Mismo los he elegido y formado. Por eso podéis creerles cuando os traen Mi Palabra, podéis tomarla a pecho y dejar que se convierta en un tesoro dentro de vosotros... no necesitáis dudar de sus palabras, porque Yo, y no ellos, hablo persuasivamente a través de ellos, sólo que Me siervo de una forma humana para no dejaros sin libertad en vuestra voluntad y creencia... Aceptad lo que os digan y seguid sus palabras y sentiréis la fuerza notablemente... Seréis caritativamente tocados si vosotros mismos sois de buena voluntad y dejáis que Mi discurso os haga efecto... Porque ellos sólo os anuncian Mi Palabra... sólo os dicen lo que debéis hacer para ser felices...
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise