5762 Luz - Poder - Gracia... El Padre de casa...
6 de septiembre de 1953: Libro 63
Recibís luz, poder y gracia si solo lo pedís, si solo lo deseáis. Y ciertamente no os faltará cuando Yo os asegure todo lo que necesitáis para poder cumplir con vuestra tarea de vida terrenal. Tan pronto como os ponéis de Mi lado, tan pronto como Me contactáis conscientemente a través de la oración íntima, a través del dialogo confidencial, en el que Me demostráis vuestra fe en Mí, sois de los que son Míos, a los que ahora cuido, a los que guio, a quienes asesoro y siempre ayudo a aquellos que llegan a la altura. Pero los Míos nunca son abandonados...
De los que son Míos ahora solo Me elijo a tales que voluntariamente Me ofrecen sus servicios porque necesito personas que trabajen para Mí y Mi reino. Y estos ahora son Mis siervos que de ahora en adelante trabajan en Mi casa... ellos son completamente atendidos por Mí, porque un buen Padre de casa no permite que sufran los que trabajan para Él. Así que ninguno de Mis siervos necesita preocuparse por las cosas terrenales porque Yo asumo todas estas necesidades; y también les llegan bienes espirituales porque los usan para el trabajo en Mi viña...
Luz, poder y gracia... Qué más necesitáis cuando os doy estos bienes en abundancia... Entonces siempre podréis defenderos mientras permanezcáis en la tierra, porque entonces sabréis acerca de todo. No sois impotentes y recibís más de lo que merecéis, seréis cuidados por Mí, aunque vuestro estado espiritual aún sea deficiente... porque Mi amor pasa por alto vuestras carencias y os da gracias desmedidas que ahora podéis aprovechar y que siempre son exitosos para vuestra alma.
En cuanto Me pedís luz, fuerza y gracia, demostráis que queréis esforzaros espiritualmente... que os tomáis en serio vuestra perfección, que Me estáis anhelando y que os volvéis humildemente a Mí en vuestra reconocida debilidad para dar lo que os falta. Y siempre cumpliré las peticiones espirituales y os consideraré abundantemente. Porque sé que ahora usaréis lo que habéis recibido para Mí y para Mi reino, que obtendréis fuerza de Mí para poder servirme... Y bendeciré vuestra voluntad...
Lo que hacéis por Mí y Mi reino, os lo recompenso ricamente, porque es una obra de amor por las almas de vuestros semejantes, que están en necesidad. Es una ayuda compasiva para las almas del más allá que os necesitan para escapar de su miseria. Y vosotros Me servís a Mí cuando servís a estas almas... Dadles y recibiréis de Mí, no os faltará, mientras vosotros solo distribuyáis a los pobres y necesitados, porque entonces obráis en Mi lugar, Que quiero daros siempre y constantemente, pero os necesito como mediador mientras ellos mismo no establezcan la conexión Conmigo... Porque sólo puedo dar donde Mi don es solicitado o, si es ofrecido, recibido con gratitud y usado correspondientemente. Vosotros, como Mis mediadores y siervos en la tierra, os doy sin medida lo que deseáis, sea terrenal o espiritualmente como os lo he prometido...
amén
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