Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4991

4991 La infracción contra el orden eterno.... El cumplimiento de las proclamaciones - Último juicio....

31 de octubre de 1950: Libro 56

El final llegará sin remedio y con él el último juicio.... Porque con Mi sabiduría reconocía Yo desde eternidades la voluntad de los hombres y sus actuaciones incluidas en esta voluntad y que no se deja ver ningún ascenso hacia arriba. Pero Mi ley eterna pide un desarrollo continuo hacia arriba, y adaptado a esta ley ocurren todos los sucesos en la tierra y en el universo entero. Si se contempla una infracción constante contra Mi ley del orden se efectúa automáticamente una corrección para volver a mantener este orden, pero de un modo que se elimina todo lo ilegítimo, y también las creaciones materiales que no se usan según la ley eterna, se disuelven para poder introducirlos nuevamente en el orden en una forma nueva. Y también los hombres que han salido de este orden se pondrán en un estado que mantiene Mi orden eterno, es decir lo espiritual en el hombre existen en una funda exterior determinada según su grado espiritual; entonces pierde su existencia humana y se exilia en una funda exterior que ya fue superado hace mucho.... Ahora está fuera de toda duda que el hombre no ha reconocido para nada el objetivo de su existencia, que sólo ha prestado atención a su vida terrestre y que se ha sometido a la ley del origen eterno, la ley del amor. La tierra, que solo debe tener la función del desarrollo de lo espiritual, falta por completo este objetivo y por esto ya no debe existir más en su forma antigua, porque se movería completamente en contra del universo, en el cual cualquier creación Mía tiene su sitio determinado y lo debe seguir. Porque la tierra se usa de momento solo para un desarrollo atrás, y de hecho sus habitantes se pierden a las manos de Mi adversario. En la tierra se presta solo atención a la voluntad de aquel, mientras Mi voluntad se queda sin prestar atención o se desestima. Si los hombres cambiarían prestando atención a conocer la verdad y se dirigían hacia Mí con la petición por ayuda para llegar a la altura, Yo no destruiría a la tierra sino daria experimentar a Mi amor y bendición exorbitante a los hombres, no dejaría llegar ni un final ni un juicio final, porque una voluntad buena y una búsqueda podría conseguir todo, también el levantamiento de un acto que está estipulado desde tiempos eternos. Yo lo haría y sólo ayudaría a los hombres a conseguir su reto. Pero esta voluntad no se encuentra entre los hombres, y por esto Mi plan de la eternidad se tiene que realizar, tienen que cumplirse Mis anunciaciones, las cuales los videntes y profetas vieron de antemano, porque también vieron a donde los hombres se dirigirán. Y solo Mi paciencia enorme ha salvado a la tierra hasta ahora de su destino, porque Yo querría dar a todos aquellos la oportunidad de cambiar a su voluntad, cuyos corazones Me reconoces y a los cuales Yo enseño a Mi misericordia. Pero cada vez el número de aquellos se disminuye y en poco tiempo se verán solo dos lados, y el rebaño de los Míos será tan pequeño que ya solo en este hecho se verá el final, porque solo el diablo reina en el mundo si ha salido por completo de su orden de la ley, igual que los hombres que lo habitan, y solo puede ocurrir el final de todo lo que se verá a los hombres como creación visible, como los hombres tienen que ser exterminados que malusan su última estación del desarrollo y que pecan contra la ley básica del orden eterno, contra el amor.... Va a tener lugar esta proclamación sin remedio, porque los hombres no tendrán una voluntad mejorada, buscan sin cesar llegar hacia abajo e intentan estirar abajo a todo lo que está de Mi parte. Pero lo voy a prohibir, porque dejaré surgir una nueva tierra, y los hombres sobre ella se moverán nuevamente en el orden que es la ley major desde la eternidad y lo será para siempre; van a vivir nuevamente en el amor y serán Mis hijos en la verdad....

amén

Traducido por Bea Gato