Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4823

4823 Finalidad de la creación.... Repetida procreación en la materia....

25 de enero de 1950: Libro 55

Un Creador sumamente sabio estaba obrando cuando lo espiritual caído estaba en una distancia extrema de Dios y había cortado cualquier camino de regreso a Él a través del pecado más grave, al despreciar Su poder de amor en arrogancia y ansia de poder. El amor infinito de Dios pensó en medios y caminos para redirigir a Sí Mismo a este espiritual que se había vuelto pecador, y su sabiduría reconoció una manera de tener éxito.... la de caminar a través de toda la creación, a través de formas que tenían que servirse una a otras y así cumplieron el propósito que se les había fijado.

Así que Su amor y sabiduría formaron caparazones exteriores para lo espiritual caído a partir de su fuerza, que debería estimularlo a una actividad de servicio, y estas obras de creación estaban destinadas a producir un desarrollo gradual ascendente, en el que lo espiritual en cierto modo podía servir en el estado de obligación y, por lo tanto, la distancia de Dios disminuyo más y más. Estas formas, es decir, las obras divinas de la creación, son tan diversas que pueden albergar cualquier espiritual inmaduro, es decir, a través de su natural devenir y desaparecer también pueden absorber las más diversas esencias espirituales y liberarlas nuevamente hasta que estas esencias haya logrado un cierto grado de madurez.

El divino Creador vio todas las posibilidades de un proceso de maduración, y por eso también la creación es tan diversa e incluye obras de creación en todos los grados de madurez, pero es sólo evidente a Él que éxito puede registrar lo espiritual, sólo Él sabe las muchas estaciones por las que tiene que pasar, hasta llegar a la etapa del libre albedrío como ser humano. Él determina la duración de cada creación, Él determina la actividad de cada obra, y sólo Él reconoce el grado de madurez, que luego permite la encarnación como ser humano.

Pero también vio los éxitos negativos, vio lo espiritual, que estaba casi en Su vecindad, hundiéndose de nuevo en las profundidades, porque disponía del libre albedrío, lo cual es respetado por Dios y del que vuelve a abusar el ser.... Sus creaciones dan testimonio de una sabiduría insuperable, por lo tanto hay que andar caminos de desarrollo, que podrían garantizar un éxito seguro, pero Él deja al ser humano la más plena libertad, Él no lo obliga a reconocerlo y someterse a Él, pero como Él tampoco deja al ser completamente a Su oponente, sino que constantemente trata de ayudarlo a levantarse para que llegue a ser feliz.

El amor infinito y la insuperable sabiduría de Dios reconocen y ciertamente crean todas las posibilidades para la perfección de lo espiritual, pero el libre albedrío es decisivo, si el desarrollo ascendente en la etapa como ser humano siga adelante o que lo espiritual permanezca en resistencia y se vuelva a hundirse en las profundidades y el curso de desarrollo tiene que comenzar de nuevo. (26.01.1950) La repetida procreación en la materia sólida sólo tiene lugar cuando un periodo de creación ha llegado a su fin, es decir, cuando todas las creaciones sueltan lo espiritual, y serán disueltas para este propósito por la voluntad de Dios, lo que significa la destrucción de la obra de creación, donde comenzó el desarrollo ascendente.

La sabiduría y el amor de Dios permiten que surjan nuevas creaciones, que nuevamente son adecuadas debido al propósito que se les ha asignado, para ayudar a lo espiritual atado en ellas para el desarrollo ascendente. Entonces continua el curso interrumpido del desarrollo nuevamente con el mismo propósito, la etapa del libre albedrío como ser humano, donde puede tener lugar la perfección o la renovada recaída, porque el amor de Dios se acerca nuevamente al ser y también puede ser aceptado o rechazado nuevamente.

Ante Dios, mil años son como un día, y Él cuida de los seres con infinita longanimidad y paciencia, y cuando son necesarias innumerables fases de desarrollo, si un ser persiste particularmente obstinado en resistirle.... Una y otra vez Él le da nuevas oportunidades hasta que finalmente haya alcanzado su objetivo, hasta que haya encontrado el camino de regreso a Aquel de Quien una vez surgió....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise