Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4459
4459 Combate duro y pena antes del fin - La ayuda más segura es la palabra de Dios
13 de octubre de 1948: Libro 52
Vosotros hijos de Mi Amor tenéis que manteneros firmes aún un breve tiempo, hasta que os sea la liberación de la forma. Es un combate duro el que tenéis aún que pasar, pero para vosotros no será demasiado difícil, porque Yo constantemente os estoy cerca y en cada momento os concedo apoyo. Pero por causa de vosotros mismos tenéis que atrevesar aún por el dolor, para que estéis purificados y no necesitéis temer el Juicio final ya más. Pero cada vez de nuevo os doy la aseveración, de que sólo breve tiempo permaneceréis aún en esta tierra, de que cada día es aún un obsequio, en el que podéis ganar mucho si sumisos os sometéis en todo lo duro que os sobrevenga. Eso es pasajero, y una vez Me miraréis a Mí llenos de agradecimiento, que por el dolor Yo os he trasladado en el grado en el que Me podéis a Mi mirar, Yo quien por el dolor he ayudado a vuestra alma a una rápida madurez, porque el tiempo es sólo muy breve hasta el fin.
Todos vosotros sois Mis hijos, Yo veo bien vuestro padecer, pero Yo sé también la necesidad de él, y así es el dolor por otro lado sólo amor a vosotros, y vosotros debéis acogerlo agradecidos de Mi Mano, pues no os sobreviene nada que Yo no lo sepa, o que no sea bueno y bienhechor por Mí estimado. Pero abandonados por Mí no estáis jamás, aunque lo parezca, como si Yo no oyera vuestra oración. Cada llamada desde el corazón penetra en Mi oído, y Yo estoy siempre dispuesto a ayudar, sólo que no siempre es para vosotros perceptible. La merced de arriba, Mi Palabra, será siempre para vosotros un remedio seguro si os imagináis débiles o totalmente desanimados. Dirigíos a Mí en la oración, y recibid entonces la respuesta mediante la acogida de Mi Palabra, y os sobrevendrá una paz, y Mi Fuerza se desbordará en vosotros, de tal modo que sois capaces de llevar todo lo que Yo os envíe. No necesitáis sufrir, pues Mi Palabra es la compensación del más pleno valor íntegro para todo de lo que carezcáis, lo que os falte y os haga desdichados.
Toda pena y preocupación desparece, si leéis Mi Palabra y dejáis que penetre en vuestro corazón. Pues Mi Palabra soy Yo Mismo. ¿Y podéis sentir realmente sufrimiento, si Yo estoy cerca de vosotros? Demostrad vuestra fe, y tomad a pecho Mi consejo, dejádme que os hable, y nada os afectará, ninguna pena os oprimirá en el momento que entréis en contacto y comunicación Conmigo.
Amén
Traducido por Bea Gato