4082 “Para Dios nada es imposible...”

11 de julio de 1947: Libro 50

Donde la ayuda terrenal ya no parece posible, allí a menudo se reconoce claramente el amor de Dios, que permite incluso que suceda lo que parece imposible, para que la gente aprenda a creer en Él y a amarlo por encima de todo. Para Dios no hay límites de Su poder, y lo que Él quiere, sucede. Entonces no hay nada que no pueda lograr, porque todo es posible para Dios. Entonces, las personas a menudo se atormentan innecesariamente a lo largo de la vida en la tierra, porque si quieren lograr algo extraordinario en la tierra, solo necesitan pedir ayuda a Dios. Él siempre puede ayudar y siempre ayudará. Pero solo pueden ganar esta fe ejerciendo el amor al prójimo, porque toda buena obra establece la conexión con Él y así se asegura la recepción de fuerza, que, como irradiación de Dios, también debe conducir inevitablemente a Dios. Y debe aprender a creer y lo hará también cuando se esfuerce hacia arriba con voluntad seria.

En el último tiempo antes del fin sucederán las cosas más maravillosas, que parecen sobrenaturales y sin embargo sólo encuentran su explicación en la voluntad del ser humano y en la fuerza de la fe. En ellos reside toda la explicación de todo lo que os parece incomprensible, pero que en realidad es sólo el resultado de una forma de vida correcta ante Dios. Y así, no basta que las personas se llamen formalmente cristianas, que se confiesen a la iglesia a la que pertenecen, si no viven el cristianismo, si no dan testimonio a través de su forma de vida de que pertenecen a la comunidad de creyentes, que forma la verdadera Iglesia de Cristo.

Se requiere una fe viva y amor al prójimo activo para hacer efectiva la fuerza del espíritu. Pero entonces el ser humano también dispone de una fuerza extraordinaria, porque es el poder de Dios que fluye a través de él y para el cual no hay límite. Por lo tanto, el hombre puede lograr cosas insólitas con el poder de Dios, pero así como Dios Mismo puede aparecer en forma de ayuda que parece sobrenatural porque ocurre a menudo cuando ya no hay ninguna esperanza de ayuda.

Para Dios nada es imposible... El hombre debe repetirse esto a sí mismo una y otra vez en cada situación difícil de la vida, y entonces su fe experimentará una fuerza que el hombre ya no tendrá una situación crítica, que destierra toda angustia con su actitud hacia Dios, con su fe profunda e inquebrantable en Su ayuda y, por tanto, despreocupada y confiada ante cada necesidad. Y entonces Dios también lo ayudará, porque no dejará que una fe fuerte se avergüence. Nada es imposible para Dios... Él puede lograr cualquier cosa si quiere y quiere lograr cualquier cosa si Sus hijos Lo invocan como su Padre amoroso y confían en Él incondicionalmente. Entonces Él cubre todas las necesidades de los Suyos y los ayuda en todas dificultades y aflicciones terrenales. Porque Él es un dios de amor, y el amor siempre dará y ayudará, porque quiere hacer feliz...

amén

Traducido por: Hans-Dieter Heise

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

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