Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/3964

3964 Predicción del final inminente. Una fe débil

29 de enero de 1947: Libro 49

Ya sabéis que ya no tenéis que esperar una larga vida terrenal, y que cada día es una Gracia que os está concedida para que aún podáis madurar - si aprovecháis el tiempo convenientemente. Esto lo sabéis por mi Palabra. Pero vuestra fe aún no es suficientemente profunda para que mi Palabra os estimule a ser diligentemente aplicados. Todavía dudáis en la Verdad mi Palabra, en lo que se refiere al final inminente. Pero aun así deberíais trabajar con toda diligencia en vosotros porque el final es inminente...

Cada vez de nuevo me acerco a vosotros y os prevengo contra una vida despreocupada, y cada vez de nuevo os advierto: ¡Observad mi Palabra, profundizaos en ella y vivid según ella! No sabéis cuándo habrá llegado la última hora para vosotros, de modo que no sabéis cuánto tiempo os queda hasta el final. Por eso deberíais vivir así como si cada día fuera el último para vosotros...

Siempre mando mis espíritus serviciales a vuestro encuentro, y estos os transmiten pensamientos llenos de Luz que guían vuestros sentidos al Reino espiritual. Y también en la Tierra os mando mis mensajeros que os deben informar sobre el final venidero y llamaros la atención sobre las señales del tiempo final... los que deben despertar en vosotros la fe firme... los que deben comunicaros mi Palabra directamente dirigida a la Tierra.

De modo que procuro continuamente aclararos que las cosas van en serio, para facilitaros un final bienaventurado. Pero todos vosotros no tomáis mis Palabras suficientemente en serio... vuestra fe es todavía demasiado débil para que podáis llevar vuestra conducta conforme a mi Palabra, a pesar de que vuestra voluntad esté dirigida hacia Mí.

Por eso os advierto cada vez de nuevo: Profundizaos en mi Palabra... haced que el pensamiento sobre el final se haga vivo en vosotros y sed preparados... en vista del final tomad lo terrenal por menos importante... y también ante la gran miseria espiritual que aumentará cuanto más se acerca el final.

Aprovechad de todas vuestras fuerzas para desarrollaros espiritualmente al alza, confiando a Mí la preocupación por vuestro cuerpo... Aprovechad el poco tiempo que os queda hasta el final... Sed continuamente activos en el amor... Sacad en todo momento fuerza de mi Palabra... Advertid y enseñad a vuestros semejantes que hagan lo mismo, y ayudaos de esta manera mutuamente a alcanzar en la Tierra la meta que os he marcado... Ayudaos mutuamente a haceros perfectos, porque sólo queda poco tiempo hasta el final...

Amén.

Traducido por Meinhard Füssel