Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2897

2897 La separación de los espíritus.... El último juicio....

26 de septiembre de 1943: Libro 37

El adversario va a rabiar sin misericordia entre los Míos, sin misericordia entonces va a ser Mi juicio.... Porque solo si los espíritus van a separarse, habrá gente que Me van a reconocer, y aquellos que Me niegan completamente y que comienzan la lucha contra todo que Me son fieles y que apuntan hacia Mi. Y entonces ha llegado la hora cuando tiene lugar la separación, cuando se elimina sin misericordia la funda de cualquier espíritu que guarda la resistencia contra Mi, y que va a ser captado a una forma nueva, más dura para tiempos eternos. Este juicio tiene que tener lugar, sino se perdería también lo que está por Mi lado, porque Satanás trabaja con toda fuerza que está a su alcance por el bien de la última libre decisión. Y Mi amor presta ayuda a todos los hombres, pero no puede ejercer dónde se rechaza. Y por esto el hombre cae cada vez más profundo para caer finalmente completamente a manos del contrayente y llega a lejanías enternas de Mi para empezar allí su nuevo desarrollo para poder ser bendito un día. Aparentemente es un acto cruel, pero que incluye como objetivo la ganancia de los renegados y que no se puede evadir, porque una reganancia no sería posible de otro modo. Aquel que me rechaza se aleja más y más de Mi, y esto significa un enfriamiento de su sustancia espiritual, un endurecimiento en una materia mucho más dura. El espíritu tiene que pasar y probar ahora todas las torturas de esta atadura hasta que pida por sí mismo por la altura y la liberación y deja atrás el rechazo contra Mi. Porque Yo quiero a Mis criaturas, y no permito perder a ninguno de ellos para siempre. Pero donde no se reconozca a mi amor, Mi poder y sabiduría se tienen que reconocer el día del juicio final, cuando se liberan a los Míos de minería terrestre más grande posible en cuanto venga Yo Mismo para juzgar a los vivos y los muertos, que se mantienen con fe en Mí y que van a vivir eternamente y los que son Mis contrayentes y que tienen que caer por esto en la muerte espiritual tanto tiempo hasta que reconozcan a Mi amor y hasta que pidan por ello, entonces también despiertan a la vida. Pasarán tiempos eternos en torturas mayores de la prisión, porque todo lo que Me rechaza tiene que ser atado para que su influencia ya no pueda dañar a los que buscan a Mí, a aquellos que se mantienen fieles a Mi también en tiempos de miseria terrestre más grande.... Y este juicio ya no se encuentra mucho más lejos.... Y lo que pasa de sufrimiento y tristeza, de sustos y necesidades por la tierra de antemano son remedios para ayudar a los renegados a reconocer a Mi y buscarme. Pero aquel que ya ha caído en manos de Mi adversario, ya no me podrá reconocer, esta ciego y solo ve en el mundo con sus alegrías su ǘltimo cumplimiento de su vida terrestre. Y ante sus ojos todo se perderá, y él mismo va a caer al abismo, porque su anhelos fue el rechazo Mío, porque se ha entregado a aquel poder que le quiso llevar a la perdición para siempre....

amén

Traducido por Bea Gato