Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2761
2761 El reconocimiento correcto significa un mayor desarrollo...
31 de mayo de 1943: Libro 34/35/36
Estar en el reconocimiento correcto significa para el hombre la maduración de su alma, porque el reconocimiento es el conocimiento sobre el significado y el propósito de la vida terrenal, sobre su tarea terrenal, sobre la relación correcta con Dios, sobre la sabiduría, omnipotencia y el amor de Dios, y sobre el inicio principal y el destino final de toda criatura.
De esto resulta que el hombre sabiendo ajustará su vida terrenal de otra manera, como cuando pasaría su vida en ignorancia de esto. Se esforzará espiritualmente por acercarse al Ser más perfecto, al Creador del cielo y de la tierra, tratará de asimilarse a este Ser más elevado y, por tanto, también madurar en consecuencia, es decir, desarrollarse hacia arriba. Por lo tanto, es extremadamente importante esforzarse por el conocimiento correcto, el reconocimiento; es muy importante penetrar en la verdad y, por tanto, pedirla, de lo contrario no se la puede llevar a la gente.
La voluntad del hombre debe estar siempre dirigida a recibir la sabiduría divina, tiene que reconocer a Dios como la fuente original de la sabiduría y llevar el deseo de poder sacar de esta fuente, y debe, si se abre a Él, dejar que el agua viva se desborda sobre él... entonces llegará al reconocimiento más completo y será extremadamente bendecido ya en la tierra. Luego rompió el hechizo que lo separa del reino espiritual; entonces ya está conectado con el reino espiritual, porque el conocimiento que ahora recibe es un bien espiritual, pertenece al reino espiritual y, por lo tanto, el hombre se convierte en un candidato para el reino espiritual, en cuanto se le transmite el bien espiritual desde allí.
La vida terrestre es ahora solo una transición para él, sus pensamientos demoran más encima de la tierra y todos sus sentidos son atraídos hacia el reino desde el cual fluye el conocimiento hacia él. Y este anhelo por el reino espiritual también le permite esforzar por la perfección, vive su vida conscientemente, trabaja en sí mismo porque el saber del objetivo lo impulsa a esforzarse ansiosamente, porque sabe que la vida terrenal solo es el medio para el fin, la etapa preparatoria para la vida en el más allá, que se supone que le traerá libertad espiritual, luz y felicidad....
El reconocimiento es un gran progreso en la tierra; quien camina en el reconocimiento ya no pertenece exclusivamente a la tierra, sino que su alma a menudo se queda dónde está su verdadero hogar. Los pensamientos de aquel, que está en el reconocimiento vagan hacia arriba, escapan del peso de la tierra, y esto es siempre una ventaja para el alma, que deja el cuerpo desatendido, dejándose guiar por el espíritu en el hombre allá donde aguardan los tesoros espirituales, donde los amigos espirituales le enseñan y le ofrecen verdades eternas... el alma se encuentra a gusto en este reino y solo regresa a la tierra con desgana, pero lleva consigo el bien espiritual hacia abajo y así continua madurando y desarrollándose hacia arriba...
Amén
Traducido por Hans-Dieter Heise