Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2446b

2446b Sabiduría impensable sin amor.... Conocimiento imperecedero....

12 de agosto de 1942: Libro 33

Por lo tanto, el camino de la verdad sólo se puede encontrar en el amor, y cuando falta el amor, la gente toma un camino equivocado que los aleja de la verdad. Porque ser sabio significa poseer un saber que responda a la verdad. Pero ser sabio también significa tener un saber imperecedero, porque el saber no vale nada si con la muerte se hunde en la nada. Pero el saber imperecedero es sólo el saber de las cosas que se encuentran fuera del reino terrenal, y este saber es poco buscado, mientras que el hombre busca sondear todo lo que hay en esta Tierra y pone su honor en ser reconocido como sabedor.

De hecho, este saber también puede ser beneficioso porque permite a los hombres obrar con ello en amor. Un saber así puede ser un capital en manos de quien lo posee, si lo utiliza de tal manera que ayude a sus semejantes y, por tanto, sea activo en el amor.... Entonces adquiere bienes para la eternidad, incluso con conocimientos terrenales, y éstos son imperecederos, aunque no los lleve consigo a la eternidad.... Sin embargo, con el saber espiritual, una persona también puede ayudar a sus semejantes impartiendo bienes espirituales directamente al alma, es decir, acumulando también bienes imperecederos, tanto para sí mismo como para los demás seres humanos a quienes imparte bienes espirituales.

Y sólo la personas que obra y crea para la eternidad es verdaderamente sabia, quien crea claridad sobre las cosas espirituales mientras está en la Tierra y entonces vive su vida en la Tierra de acuerdo con esta cognición. Su saber es indestructible y sumamente valioso, aunque la gente no lo valora adecuadamente por desconocimiento. Sin embargo, el conocimiento del mundo normalmente sólo ayuda a aumentar los bienes terrenales y, por lo tanto, se sobrevalora en la Tierra sin aportar ningún beneficio al alma, a menos que se utilice en beneficio de otras personas, es decir, se evalúe en el amor hacia ellas. Y así, el amor siempre debe dominar al hombre al mismo tiempo, si el hombre ha de tener un verdadero saber o si el conocimiento del mundo ha de traerle éxito espiritual. Pero sin amor, el saber de la mayoría de los humanos está lejos de la verdad....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise