Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2433
2433 Amor de Dios.... Misterio del Amor divino....
3 de agosto de 1942: Libro 33
Las palabras no pueden expresar cuán amorosa y sumamente buena es la Deidad Eterna. A los humanos les resulta difícil creer esto en vista de los muchos sufrimientos que atraviesan la Tierra, porque les resulta incomprensible que ellos también sea sólo la expresión del amor divino, que tengan como causa el amor y que éste sólo tenga el objetivo de formar a los humanos de tal manera que puedan recibir la irradiación del amor divino en toda su plenitud. El amor de Dios es inmutable, sigue siendo el mismo y para siempre, y si su efecto es el sufrimiento, entonces la razón es del hombre mismo, que vive de manera diferente de como es el requisito para poder recibir el amor divino en su estimulante poder.
Sin embargo, si el corazón humano ha sido formado de esta manera, entonces el alma es extremadamente feliz, entonces está cerca de su estado original.... Debido a que emanó del amor de Dios, es producto de su divina voluntad de amor. Por eso Dios nunca deja caer lo que emana de Él, sino que lo apoya constantemente; busca formarlo y volverlo a su estado original en la forma en que una vez se alejó, es decir, se volvió apostata del amor divino. Este proceso de transformación es nuevamente sólo el efecto del amor eterno e inmutable de Dios....
Todo lo que existe surgió de la voluntad del amor de Dios, y por eso el amor divino nunca puede apartarse de Sus seres creados, aunque crean que se están separando de Él. No puede dejar a su suerte lo espiritual que se ha alejado de Él, de lo contrario el amor de Dios sería cambiante e inestable. Y por lo tanto, todo lo que Dios hace con el propósito de recuperar esto tiene que estar basado en Su amor, incluso si da la apariencia de desamor. La sabiduría de Dios también determina qué forma usa Dios para lograr el regreso de lo espiritual caído a Sí Mismo.
Donde la sabiduría y el amor obran juntos, debe haber éxito. Y este éxito se producirá inevitablemente si el ser renuncia a su propia voluntad y se entrega incondicionalmente al amor de Dios.... si reduce su distancia de Dios por iniciativa propia, es decir, si ya no resiste más al amor de Dios. Y el ser también renuncia a su resistencia tan pronto como reconoce el amor de Dios, tan pronto como base en él la creencia de que el Creador de todas las cosas es Amor en Sí Mismo, y se siente, como creatura Suya, agarrado por Su amor.... lo cual sólo puede suceder si vive en el amor mismo y así comienza a aprender el misterio del amor divino.... Entonces se esfuerza hacia este Amor Eterno para un día conectarse completamente con Aquel de Quien surgió....
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise