Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2304
2304 Concepto del mundo con Jesucristo
16 de abril de 1942: Libro 32
Únicamente un concepto del mundo que aprueba a Jesucristo –de modo que está fundada en la divina Doctrina de Amor– puede resultar en una bendición para un pueblo, y tanto espiritualmente como también materialmente puede garantizar que prospere. Porque un pueblo que ha hecho suyo tal concepto del mundo se queda profundamente unido con el que proclama tal Doctrina divina de Amor. Este pueblo madurará espiritualmente, y terrenalmente no estará expuesto a tan grandes tormentos porque procura a vivir conforme a la Voluntad de Dios, pues no precisa de tantos contratiempos que deben hacer que cambie.
Un pueblo que toma al Redentor divino por modelo, que le acepta y así se presenta a Él de manera afirmativa, no vive solamente una vida mundana... por lo que no tendrá sólo intereses materiales sino también aspira a bienes espirituales, pues lleva una Vida interior y aspira a la Altura. Porque por su fe también tiene saber, dado que la fe también le exige surtir efecto en el amor, lo que le produce un saber.
Y gente de saber también vive su vida conscientemente con Dios, es decir, los seres humanos nunca se apartarán de Él ni rendirán homenaje al mundo. De modo que estos ya han llegado a vencer la materia, porque acogidos por el Amor de Dios, ven en la unión con Él el propósito de su Vida.
Un pueblo que de esta manera se ha liberado de la materia ya se encuentra en un grado de madurez elevado; aunque aun así nunca procurará a imponerse a otros pueblos... es pacífico y servicial, no procura a aumentar su poder o a hacerse valer, pues vive calladamente y retraído, de modo que tendrá poco prestigio ante el mundo - pero mucho ante Dios...
Tal pueblo nunca podrá comprender que alguna vez podría imponerse un concepto distinto que niega todo que es de Origen divino - un concepto que también rechaza la divina Doctrina de Amor y quiere sustituirla por preceptos mundanos. Pero este concepto no será duradero y el pueblo que profesó a él se hundirá interminablemente porque todo que no sea de origen divino no perdurará... todo que forma parte una ideología sin Jesucristo.
Y aunque los hombres luchen contra Él y su divina Doctrina de Amor, nunca podrán destruirla; y una ideología sin Jesucristo se desplomará, como también un pueblo que profesa tal ideología, más pronto o tarde se derrumbará...
Amén.
Traducido por Ion Chincea