Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2221

2221 Sucesor de Petri.... Poder eclesiástico – secular....

27 de enero de 1942: Libro 31

Lead en la Biblia y vais a veréis que el espíritu de la verdad ha sido reprimido de la manera más obvia. Por lo tanto, la Palabra de Dios ha sido retenida de vosotros, para que vosotros, que estáis buscando la verdad, no llegáis a verla.

La tradición se mantiene fielmente, pero hasta qué punto esta tradición corresponde a la enseñanza de Cristo, eso no se examina. Y con qué frecuencia se ha cambiado el significado de la Palabra divina, con qué frecuencia se ha malinterpretado la Palabra de Dios y qué raras veces se ha criticado la mala interpretación. Este engaño a la humanidad no se puede enfatizar lo suficiente, ya que ha sido la causa de todas las divisiones y luchas religiosas.

Cuando Jesús caminó sobre la tierra, habló del reino de Dios, de un reino que no es de este mundo. No habló de poder mundano, tampoco habló de un poder eclesiástico, o de una organización,.... tampoco habló de hombres que deberían reinar sobre Su iglesia.... Él solo habló a Sus discípulos: “Id y enseñad a todos los pueblos....” Él les dio instrucciones de instruir a los hombres en Su enseñanza de Amor, y les prometió Su colaboración, si permanecieran en Su espíritu (mente)....

Porque mientras enseñaban el Amor, tenían que vivir en el Amor ellos mismos, y entonces el Señor estaba con ellos, que es el Amor. Pero donde el Amor gobierna, el poder gobernante es innecesario.... Donde el Amor gobierna, uno sirve al otro, y donde el Amor gobierna, los mandamientos son innecesarios, a menos que el mandamiento de Amor sea predicado, que Dios Mismo haya dado. Lo que el Amor enseña corresponde a la voluntad divina, pero los demás mandamientos que han sido añadidos y no son de acuerdo con la voluntad divina, porque un dominio presupone un poder gobernante....

Pero los hombres deben vivir entre ellos como hermanos, sujetos solamente a la voluntad de Dios, mientras quieren ganar el reino de Dios. De ninguna manera deben levantarse contra el poder mundano que Dios ha introducido por la disciplina y el orden, donde se excede, pero Su reino no es de este mundo.... En Su reino, Él solo el Señor y gobernante y realmente no necesita hombres en la tierra que Le representan a Él y ejerzan su poder frente a los próximos. Pero ¿dónde señala una Palabra del Señor a tal poder en su camino terrenal?....

(26.01.1942) Él ha llevado una vida en el Amor, dio Amor y enseñó el Amor.... Pero el verdadero Amor excluye el deseo de querer gobernar.... No debe determinar lo más fuerte a lo más débil, incluso donde se enseñó el cumplimiento de los mandamientos divinos. Para un acto llevado en coerción, y no importa cuán buena y noble sea, no lleva una valoración muy alta. Solo cuando el libre albedrio se ha vuelto activo en el hombre, estas acciones son considerados ante Dios. Y entonces Dios solo exige el libre albedrio del hombre.

Pero los hombres en la tierra nunca tienen el derecho de agregar arbitrariamente sus mandamientos a los mandamientos divinos. Y mucho menos cuando el cumplimiento de estos mandamientos se convierta en un deber para los hombres, es decir, se les exige bajo la amenaza de castigos temporales o eternos. Debido a que, para escapar de este castigo, ahora se cumple un mandamiento que, normalmente pasó desapercibido. Por lo tanto, el cumplimiento de tales mandamientos no puede tener valor profundo ante Dios y por la eternidad.

Cuando los discípulos llevaron a cabo la comisión de Cristo y llevaron el evangelio al mundo, la obra de Dios fue claramente visible, porque sanaron a los enfermos en el nombre de Jesús, expulsaron espíritus malignos y obraron milagros para afirmar lo que enseñaron. Porque la mente de Dios estaba con ellos y en ellos; fue todo lo que lograron, la actividad mental divina. Proclamaron la doctrina de Cristo, la divina enseñanza del Amor, y también vivieron el amor ante la gente y de este modo se eliminó la voluntad de gobernar por completo, porque eran como hermanos entre ellos y se servían en el Amor.

Este fue la función, que Jesús Cristo ordeno a Sus discípulos para su trabajo en adelante.... pero no empleó a un apóstol como jefe, como líder, a quien todos deberían someterse. Pero lo que se formó después se desvió completamente de lo que el Señor Mismo representaba. Se creó un poder eclesiástico-mundano, que también puso cualquier mandamiento de amor en una forma, que ya no correspondía con lo que Jesucristo Mismo había enseñado al hombre. Todavía se requería un servicio en el Amor, pero ya no se practicaba.

Y fue de crucial importancia, porque lo que Jesucristo había marcado en su camino terrenal surgió nuevamente.... Se les ordenó a las personas lo que debían hacer por libre albedrio. Y los hombres se llamaban a sí mismos por su reputación, rango y dignidad, sucesores de los apóstoles, quienes en gran pobreza ejercían su oficio.... Y se llamaba a sí misma una construcción de inmenso esplendor la única iglesia salvífica que Jesucristo instituyó con las palabras: “Eres Pedro y sobre esta roca.... “

Estas palabras han sido interpretadas por personas que aspiraban al poder, como se necesitaban; pero de ninguna manera estas palabras permiten esta interpretación, que Pedro sea el fundador de un poder eclesiástico y que los gobernantes al mando de esta iglesia sean los sucesores de los apósteles.... De aquellos apóstoles que sin rango y dignidad solo proclamaron el evangelio, la divina enseñanza de Amor, en el mundo. Pedro era el más creyente de ellos y Jesús enfatizó su fe fuerte al decir: “Tú eres Pedro la roca, sobre esta roca edificaré Mi iglesia.”

Él llama a la comunidad de creyentes Su iglesia, porque aquellos que quieren adquirir el reino de Dios, tienen que unirse en la fe más profunda y así formar Su iglesia. Así es Su voluntad y expresó esta voluntad en las palabras. Pero no es Su voluntad que unos dignatarios altos y más altos se sienten como líderes de una comunidad como tal, y también usan Su poder como tal.... Que innumerables costumbres y ceremonias hacen que el núcleo real no sea importante; es decir, que la divina enseñanza de Amor es ignorada por innumerables apariencias externas, a las que se les da demasiado importancia, y por lo tanto la misión de los apóstoles en el mundo de proclamar el evangelio ya no se reconoce.

Por supuesto, incluso entre esos gobernantes puede haber hombres según el corazón de Dios, y Dios realmente no les priva de Su Espíritu y Su gracia, pero su sabiduría no es la consecuencia de su posición o el alto cargo que ocupan, sino de su correcto estilo de vida ante Dios.... Estos son los verdaderos sucesores de Pedro, porque son fuertes en la fe, y de la fuerza de fe sacan la sabiduría, porque entonces son como una roca de la cual fluye el agua viva.... Entonces son los verdaderos representantes de la Iglesia de Cristo, que es la comunidad de los creyentes.

Amén

Traducido por Hans-Dieter Heise