Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/1887

1887 Explicación espiritual y terrenal de la catástrofe mundial....

13 de abril de 1941: Libro 28

Por insignificante que pueda parecer a vosotros, lo humanos, que se estén produciendo cambios en la naturaleza, esto sigue siendo de suma importancia, porque son presagios de grandes acontecimientos. Todo proceso debe tener una explicación tanto espiritual como terrenal, es decir, lo que ocurre en la vida espiritual también debe poder explicarse lógicamente en términos terrenales y debe tener nuevamente su justificación en procesos puramente naturales....

Por lo tanto, la liberación de lo espiritual de la forma sólida debe estar relacionada con un fenómeno natural que se comprensible para el hombre, y este fenómeno natural debe poder explicarse en términos naturales (humanos).... y esto con el fin de que los seres humanos no están obligados a aceptar el acontecimiento, que tiene lugar por el bien de los seres espirituales, para ser aceptado como una misión divina.

Un acontecimiento extraordinario para el que no se pudiera encontrar una explicación obligaría a los humanos a creer, y tal creencia no está ordenada por Dios. Pero cuando los humanos pueden darse una explicación, no es tan fácil ver una misión divina en una catástrofe natural. Si lo hace de todos modos, entonces su fe es completamente libre y, por lo tanto, justa ante Dios.

Ahora, innumerables señales preceden a la gran catástrofe mundial. Pero los creyentes sólo prestan atención a una pequeña parte, por lo que aún quedan grandes sorpresas por delante para el mundo. La explicación de una catástrofe mundial es fácil de entender para el ser humano creyente. Pero también tiene que aceptarla sin que se le pueda demostrar. Pero la explicación terrenal también será comprensible para el ser humano incrédulo, porque también tendrá la oportunidad de comprobarla.

Y por eso en un futuro próximo se producirán un aumento de fenómenos que presagian un cambio violento en la superficie terrestre. Las desviaciones de las leyes de la naturaleza son todavía pequeñas, pero el decreto divino también suprime las leyes de la naturaleza cuando parece necesario. Cada acontecimiento tiene su propósito, y tantos fenómenos naturales desencadenan una catástrofe repentina, que se produce por voluntad divina dentro de los límites de la naturaleza para no forzar a la gente a creer.

Cuando el interior de la Tierra empieza a agitarse, siempre lo han precedido ciertos desplazamientos de la superficie terrestre. Así, en algunos lugares de la Tierra habrá cada vez más masas de agua que buscan un desagüe y no lo encuentran por ningún lado. Como resultado, empujan hacia arriba y con la fuerza elemental crean un desagüe. Este es el preludio de la catástrofe que se avecina, que se está produciendo de forma puramente natural....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise