Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/0361
0361 Amorosas Palabras paternales....
3 de abril de 1938: Libro 8
Y los que son Míos deben ser bendecidos, porque siempre que Me llamen, les doy la fuerza para luchar por la salvación de su alma. Sin embargo llegarán tiempos en los que todo a vuestro alrededor parecerá envuelto en tinieblas.... Pero entonces también estoy cerca de vosotros, y no tenéis que nada que temer.... Pon tu oído en mi corazón y escucha: estás destinado a recibir la gracia divina , hijo Mío, y así encontrarás un acto de amor realizado en ti, que se aplica a todos Mis queridos hijos de la tierra.... Habitáis en esta tierra en una necesidad profunda y no prestáis atención a la mano salvadora que Yo quiero ofreceros, pero como Yo Me refiero a Mis hijos que Me aman, a quienes siempre estoy cerca, así también habito en vuestra cercanía, vosotros, que no queréis reconocerme y espero pacientemente hasta que un tranquilo deseo se agite en vuestros corazón, un deseo de fuerza espiritual y fortalecimiento.... entonces estoy listo para vosotros.
Si ahora queréis mantener Mi nombre santo, seréis bendecidos para siempre. Dejad que el mundo amanece, dejad que destruya.... Su poder nunca llegará hasta vuestro corazón más íntimo..... Este pertenece a vosotros mismos, podéis entregárselo con confianza a vuestro Salvador y participaréis del reino eterno con su gloria.... y sabréis prescindir del reino en la tierra, y sus bienes y dignidades.... porque Mi reino no es de este mundo.... Pero a ti, hijo Mío, siempre quiero estar a tu lado, tu fe debe fortalecerse y tu corazón solo debe latir por Mí con amor.... así recompenso a los niños que se encomiendan a Mí y les doy lo que piden....
Compara tu vida con la de antes.... ¿No eres mil veces más feliz en Mi amor?.... ¿y eso alguna vez se disminuirá mientras Me des tu corazón?.... Todas las Palabras que tengo preparadas para ti deben darte noticias de Mi amor, y todos los impulsos que pongo en tu corazón te llegan continuamente de Mí, porque Mi amor por vosotros los humanos es infinito, y puedo y os hará infinitamente feliz. Por el tiempo en la tierra, tu trabajo espiritual te traerá una felicidad tan profunda que nunca más abandonarás esta actividad tuya....
De esta manera recompenso tu perseverancia y tu profundo deseo de servirme, hijo Mío.... Considera siempre el amor como el mandamiento más alto, y combina todo tu pensamiento con obras de amor.... y alrededor de ti habrá un canto y tintineo en los corazones de aquellos que sienten tu amor, porque todo lo que haces por amor a Mí, te acerca cada vez a Mí y un día te llevará a la bienaventuranza celestial....
Amén
Traducido por Hans-Dieter Heise