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Childhood of God.... Jesus Christ becoming one with God....

The human being's spiritual aim should be the attainment of childship to God, for he is given the opportunity to develop into a brightest being of light during his life on earth and to depart from earth in complete union with God. This is the becoming one with God, which Jesus Christ also achieved on earth and which all people can attain if they strive for it in all seriousness. It is not beyond a person's strength, it only requires the strong will to live as Jesus Christ lived on earth, in unselfish love for one's neighbour. Unselfish neighbourly love is what Jesus preached to people, and it is and remains the core of Christian teaching, it is the content of the gospel which His disciples were to spread in the world. But the effect of a Christian life of love is something incomparably glorious.... the human being has become a child of God, His heir, and he enters into all the rights of the father.... it can create and shape like Him and use its strength in supreme bliss, which it fulfils through the intimate union with God. There are certainly innumerable degrees of bliss, of light and strength; depending on the degree of maturity the souls are in a blissful state if they are only recipients of light and strength, thus once they have found entrance into the kingdom of light. But a child of God is infinitely more blissful, for it has reached the degree of perfection which allows closest proximity and connection with God. It no longer feels separated from Him, it feels one with Him and yet is aware of its individual existence, it still possesses its free will which, however, has completely aligned itself with God's will, it is a blissful state of togetherness, a constant desire for and granting of God's love, it is blissful harmony, unceasing blissful activity and perpetual striving upwards, for perfection has no limit, and constant striving also belongs to bliss because it is never unsuccessful. And the human being can already reach this highest degree of happiness on earth if he has the serious will. But only a few strive for it, only a few humbly accept the fate which is imposed on them in order to be able to mature in a short time. For despite eager activity of love the soul has to be purified through suffering if it wants to be able to receive the light in all its fullness.... It must struggle on earth and endure much suffering and deprivation, it must walk the path Jesus walked on earth, love and suffer, it must carry the cross until the end.... Then the soul will merge with God, it will become one with Him, it will be His child and remain so for all eternity....

Amen

Filiación con Dios.... Jesucristo se convierte en Uno con Dios....

El objetivo espiritual del hombre debe ser el logro de la filiación con Dios, porque para esto se le da la posibilidad de que pueda convertirse en un ser de luz más brillante durante el tiempo de su vida terrenal y separarse de la tierra en completa conexión con Dios. Esta es la unificación con Dios, que Jesucristo también ha logrado en la tierra y que todos los hombres pueden lograr si se esfuerzan por lograrla con toda seriedad. No va más allá de la fuerza de una persona, sino que requiere solamente la voluntad fuerte de vivir como Jesucristo ha vivido en la tierra, en el amor desinteresado al prójimo.

Jesús predicó a los hombres el amor desinteresado al prójimo y es y sigue siendo el núcleo de la enseñanza cristiana, ella es el contenido del Evangelio que Sus discípulos debían difundir en el mundo. El efecto de una vida amorosa cristiana, sin embargo, es algo imparablemente maravilloso.... el hombre se ha convertido en hijo de Dios, Su heredero, y entra en todos derechos del Padre.... Puede crear y actuar creativamente como Él y usar su fuerza en la más alta felicidad que le llena a través de la unión con Dios.

Hay innumerables grados de felicidad, de luz y fuerza; dependiendo del grado de madurez, las almas se encuentran en un estado de felicidad en cuanto son solo receptores de luz y fuerza, es decir, cuando han encontrado una vez la entrada en el reino de la luz.

Pero un hijo de Dios es infinitamente más feliz porque ha alcanzado el grado de perfección que permite la cercanía y la conexión más íntima con Dios. Ya no se siente separado de Él, se siente uno con Él y, sin embargo, mantiene la conciencia de su existencia individual, todavía posee su libre albedrio, que sin embargo se ha adaptado completamente a la voluntad de Dios, es un estado feliz de unión, un permanente desear y conceder del amor de Dios, es la armonía más feliz, actividad incesante y dichosa y esfuerzo perpetuo hacia la cima, porque la perfección no tiene límite, y el esfuerzo constante también forma parte de la dicha porque nunca fracasa.

Y el hombre ya puede alcanzar este grado más alto de dicha en la tierra si dispone de la voluntad seria. Pero solo unos pocos luchan por ello. Pero solo unos pocos se rinden al destino que se les impone para poder madurar en poco tiempo. Porque a pesar de la celosa actividad amorosa, el alma tiene que ser purgada a través del sufrimiento si quiere poder absorber la luz en toda su plenitud.... Tiene que luchar en la tierra y soportar mucho sufrimiento y privaciones, tiene que caminar el camino que Jesús recorrió en la tierra, amar y sufrir, tiene que llevar la cruz hasta el final.... Entonces el alma se fusionará con Dios, se volverá una con Él, será Su hijo y lo permanecerá por toda la eternidad....

Amén